Apuntes acerca de la reforma energética
| Autor | Gilberto Rincón Gallardo |
| Páginas | 185-204 |
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VIII. APUNTES ACERCA
DE LA REFORMA ENERGÉTICA
UN EXAMEN incluso superfi cial de la desigualdad que defi ne la
estructura de la sociedad mexicana arroja la conclusión de
que la erradicación de la pobreza y la ampliación de las
oportunidades no están ocurriendo con la acción de la mano
invisible del mercado. Las grandes reformas fi scales, y la re-
novación de las áreas que necesariamente serán impactadas
por los cambios en esta materia —como sucede con el sector
energético—, no se realizarán por sí mismas; tampoco se
podrá mantener por mucho tiempo la inercia que ha permi-
tido la funcionalidad del país, a pesar de ese défi cit de refor-
mas razonadas y realizadas con la mirada puesta en el largo
plazo. Necesitamos abandonar esa actitud inmediatista que
ha hecho a nuestros actores políticos tratar de resolver las
coyunturas sin pensar en renovar la estructura institucional
y la cultura política que las ha prohijado. Por ello se vuelve
imperativo contar con gobiernos municipales, estatales y a
nivel federal que sean fuertes y capaces de atender las justas
demandas de la población. Requerimos espacios institucio-
nales fortalecidos, a través de los cuales sea posible la expre-
sión de las demandas ciudadanas sin exclusión y que, a la
vez, nos brinden las condiciones para el logro de consensos
que nos dirijan hacia las reformas estructurales que ya he-
mos demorado por mucho tiempo.
Cuando me referí a la reforma fi scal —en el segundo ca-
pítulo de este libro— como uno de los elementos fundamen-
tales y olvidados en la reforma del Estado, señalé que la
precondición para los cambios de largo aliento y promoto-
res de la justicia social está dada por una recaudación ha-
186 APUNTES ACERCA DE LA REFORMA ENERGÉTICA
cendaria sufi ciente para dotar de recursos a las instituciones
que promueven la calidad de vida de los ciudadanos y la re-
distribución de la riqueza. Porque actualmente la reducida
base fi scal imposibilita que el Estado cumpla con sus obliga-
ciones fundamentales. La escasez endémica de recursos pú-
blicos que gravita negativamente sobre la calidad de vida de
la población es un hecho de nuestra dinámica económica,
pero sus raíces se encuentran en un profundo desarreglo po-
lítico. El pacto corporativo que ha sido garante de la estabi-
lidad autoritaria en México ha generado privilegios discre-
cionales que erosionan la base fi scal. Es injustifi cable que
sectores económicos de grandes ingresos todavía se atengan
a regímenes fi scales simplifi cados que, en los hechos, no son
más que versiones legales de la evasión fi scal. La baja legiti-
midad de la autoridad y la defi ciente calidad de los servicios
y prestaciones que otorga a la ciudadanía desincentivan el
cumplimiento impositivo. Además, la vulnerabilidad de los
administradores fi scales frente a las presiones de los poderes
políticos y económicos, aunada a la centralización aún no
corregida del gasto y la recaudación, convierte a nuestro sis-
tema fi scal en una institución muy por debajo de los reque-
rimientos de la nación moderna que deberíamos ser. Es
riesgoso e insufi ciente para el equilibrio fi scal del país seguir
atados a los ingresos derivados del petróleo, por lo que exis-
te verdadera necesidad de diseñar políticas fi scales fi ncadas
en la ampliación de la base tributaria, en el combate a la
evasión y en el fortalecimiento de otras fuentes estables y
permanentes de ingresos. Actualmente, es una tendencia
mundial no sólo desvincular a la industria petrolera de la
base de la recaudación fi scal del país, sino también buscar
esquemas energéticos alternativos que contrarresten los
efectos nocivos para la ecología de las economías basadas de
manera fundamental en los hidrocarburos. Por supuesto, en
México este último tema ni siquiera se ha planteado de ma-
nera seria en la agenda política.
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