Introducción
| Autor | Lic. Héctor Cervantes Nieto |
| Páginas | 10-12 |
INTRODUCCION
El presente trabajo tiene como objetivo fundamental analizar en
forma práctica el manejo del contrato individual y las condiciones
de trabajo, a la luz de la Ley Federal del Trabajo y de su reforma pu-
blicada en el Diario Oficial de la Federación el día 30 de noviembre
del 2012 y entrada en vigor al día siguiente.
A lo largo del ejercicio de mi profesión como asesor jurídico en
materia laboral, he observado diversos errores en que incurren los
empresarios en la toma de decisiones (sobre todo los dueños de
pequeñas y medianas industrias) en cuanto a la forma de contratar
a su personal, en el manejo de las relaciones obrero patronales
y/o en la forma de dar por terminado el contrato de trabajo, lo
que a futuro les implica un desvío del aprovechamiento de los recur-
sos humanos y materiales.
El estudio que se presenta va enfocado a resaltar los aspectos
más importantes que derivan del manejo del contrato o relación de
trabajo, las condiciones de trabajo y sus consecuencias, ya que
en ocasiones, para obtener un ahorro mal entendido, se elige una
forma de contratar equivocada o no se establecen de manera
clara y precisa las bases de la relación laboral, es decir, los de-
rechos y las obligaciones de las partes. Lo anterior puede implicar
que no se obtenga el rendimiento esperado –pues al trabajador que
no conoce sus derechos y sus obligaciones, es difícil que se le exija
que las cumpla–, o que el patrón se quede en estado de indefen-
sión en caso de un juicio por no poder acreditar los extremos que le
corresponden, con las consecuencias económicas del caso.
Asimismo, se analizan los diferentes tipos de contratos de tra-
bajo que se encuentran contemplados por la Ley Federal del Tra-
bajo y los requisitos que es preciso satisfacer para poder celebrar
cada uno de ellos, ya que es muy común observar que se celebran
contratos por tiempo u obra determinada sin que exista una cau-
sa extraordinaria para tal efecto ni que ésta dejó de existir. Esta
situación implica correr un riesgo muy elevado, pues si no se acre-
dita el motivo, como ya se mencionó extraordinario, que dio lugar
a su celebración y se da por terminado el contrato alegando que la
obra o el tiempo por el cual se celebró concluyeron, equivaldría a
un despido injustificado con las consecuencias inherentes del caso.
V
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