Capítulo 5: Metodología para el estudio de las variables
| Páginas | 39-50 |
39
Apartado III Trabajo de campo
Capítulo 5 Metodología para el estudio de las variables
En investigación científica, una vez que se han examinado los problemas, se han revisado sus contextos
materiales e institucionales, se ha planteado el problema de investigación, la hipótesis, los objetivos y el
marco teórico-referencial, comienza la instancia de validación empírica, es decir, la de diseño (Samaja,
2004). El diseño, de acuerdo con Kerlinger y Lee (2001), permite responder preguntas de forma válida
y establece un marco para el estudio de las relaciones entre variables, a través de una estrategia para
obtener información (Kerlinger y Lee, 2001; Hernández-Sampieri et. al., 2014). Samaja (2004) divide la
instancia de diseño en dos fases: diseño del objeto y diseño del procedimiento.
5.1. Diseño del objeto
Siguiendo a Samaja (2004), el objetivo general de esta fase es decidir el objeto empírico de la
investigación, es decir, el universo y las unidades de análisis, las variables y las fuentes que se emplearán
en el estudio; el objetivo específico del diseño del objeto es traducir el lenguaje de variables en tanto
propiedades latentes al lenguaje de los observables para la contrastación empírica.
5.1.1. Diseño del universo de unidades de análisis
De acuerdo con el marco teórico-referencial, la población teóricamente posible, como la denomina
Samaja (2004) está constituida por las personas sentenciadas a una pena privativa de libertad en los
centros ubicados en Uruapan y Zitácuaro; sin embargo, como expone el mismo autor, es necesario
traducir la población teóricamente posible a universos de unidades de análisis bien delimitados.
El universo es definido por Samaja (2004) como el conjunto máximo de unidades de análisis al
que se podrán generalizar legítimamente los resultados de la investigación; el conjunto se integra por un
número finito y normalmente reducido de elementos.
Las unidades de análisis o casos de estudio son entidades sistémicas identificadas en sus límites
y características, y ubicadas en relación a sus contextos (Elger, 2009 y Stake, 2006, citados por
Hernández-Sampieri et. al., 2014). Pueden ser personas o grupos de ellas, colectividades, programas o
proyectos, políticas, organizaciones, procesos, decisiones, fenómenos, entre otros, cada uno visto como
entidades completas (Hernández-Sampieri et al., 2014).
Acorde con lo expuesto en el primer apartado de este reporte de investigación, las unidades de
análisis son las personas sentenciadas a penas privativas de libertad que habitan los CERESO Eduardo
Ruiz y Hermanos López Rayón. Ellas conforman el conjunto reducido de elementos al que se podrán
generalizar los resultados de esta investigación.
Ahora bien, el universo debe ser un número finito de elementos. De acuerdo con la información
proporcionada por la Coordinación del Sistema Penitenciario del Estado de Michoacán, mediante oficio
número ITAI/CSPEMO/039/2018 (Anexo 19), la población penitenciaria sentenciada se conformó de la
siguiente manera: 297 en el CERESO Eduardo Ruiz y 79 en el CERESO Hermanos López Rayón, un
total de: 376 unidades de análisis que conformaron el universo de estudio.
5.1.2. Diseño del universo de variables
De acuerdo con Samaja, todo objeto (natural o social) posee un número de determinaciones infinito, entre
las cuales el investigador debe elegir cuáles serán consideradas esenciales en la concepción del objeto,
para ello, es necesario “traducir los conceptos involucrados directa o indirectamente en las hipótesis en
un universo de variables bien delimitado” (Samaja, 2004, p. 258).
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba