Un ensayo transdisciplinario acerca del derecho a la información.
| Autor | Luz del Carmen Martí de Gidi |
| Cargo | Investigadora del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la Universidad Veracruzana |
| Páginas | 1-8 |
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En el presente ensayo la autora hace una propuesta de estudio transdisciplinario del derecho a la información, con un método complejo, desde sus interrelaciones con la Historia, la Ciencia Política, la Sociología, la Economía, la Psicología, las Ciencias de la Comunicación, la Ética y la Literatura.
De acuerdo a la nueva racionalidad propuesta por Sergio Vilar1, se ha operado un cambio paradigmático en la metodología científica. El paradigma de simplicidad, reduccionista y cuantitativo, se sustituye por el paradigma de complejidad que supone renunciar a hacer parcelas especializadas del conocimiento, para dar lugar a un pensamiento multidimensional, generalista y polivalente, en el que se recupere la subjetividad por encima de los conceptos estrictamente objetivos, se abandonen los conocimientos rígidos y cerrados, a fin de elaborar conocimientos flexibles y abiertos, donde la imaginación y creatividad del ser humano, asuma un papel preponderante e insumiso a las reglas estrictas de sistemas dominados por cánones demasiado rígidos.
La complejidad responde en todo caso a la naturaleza misma y modo de ser del Ser Humano al que es imposible reducir a una definición, así como al mundo en el cual se desenvuelve, ya que no observarlo o reconocerlo así, implica su fragmentación y su dispersión, cuando lo que puede conducir a su entendimiento es precisamente su enfoque holístico y no parcializado.
Este enfoque constituye por sí mismo un reto de enormes proporciones, que no puede ser abordado a partir de los principios postulados por los análisis exclusivamente disciplinarios, que resultan insuficientes para lograr su comprensión, sino aspirar a conjuntar los conocimientos alcanzados por cada una de la multitud de disciplinas existentes, y mediante su confrontación y complementación generar una nueva visión del hombre y la realidad en que se desenvuelve.
Esta nueva manera de estudiar la realidad, o mejor dicho la diversidad de realidades, es denominada transdisciplinaria, y rebasa a la disciplinariedad tradicional, a la multidisciplinariedad, a la interdisciplinariedad, sin ser antagónica respecto de ellas sino complementaria. De ese modo, la transdisciplinariedad no busca el dominio de muchas disciplinas, sino su apertura y sus implicaciones recíprocas. Page 2
La transdisciplinariedad requiere desenvolverse en torno a una serie de principios y conceptos clave que facilitan su construcción, entre los que destacan por su naturaleza misma el de la globalidad o de no fragmentación que se compadece con la realidad compleja, en donde el todo es algo más que la suma de cada una de las partes que lo integran, al igual que esas partes resultan incomprensibles de no ser relacionadas con el todo. Otro de los principios que deben ser observados, es el que la comprensión de un sistema complejo solamente es posible si se le ubica en su contexto temporal, habida cuenta de que ha tenido un origen, un desenvolvimiento, y tendrá sin duda un futuro. Tampoco puede perderse de vista, que en ese desenvolvimiento se habrán de identificar procesos de carácter irreversible, al igual que la posibilidad de establecer las condiciones para su contraria, esto es, propiciar su reversión. Sin embargo, esta posibilidad no permite asumir que ese proceso de desenvolvimiento es predecible; por el contrario, la incertidumbre predomina en tanto no es factible predecir ese futuro.
El principio de complementariedad , persigue la creación de conocimientos puente entre las diversas disciplinas; el de autopoïesis y auto organización contemplan la posibilidad de que dentro de la sociedad, se actualicen una multiplicidad de modos de organización que se dan a sí mismos los componentes de ella, en virtud de los fenómenos de orden y desorden existentes. Resulta también necesario tener presentes las simetrías, asimetrías y disimetrías, que se encuentran en la realidad compleja.
El paradigma de la complejidad, y los métodos transdisciplinarios que contribuyen a comprenderla, constituyen una alternativa para introducir al Derecho a esta nueva posibilidad de cambio paradigmático, que supere el modelo simplista y reduccionista que hasta ahora ha tenido nuestra disciplina.
El Derecho en cuanto a su estructura es una realidad compleja, que incluye normas, es decir, enunciados que tratan de influir en el comportamiento de aquellos a quienes van dirigidas; que están revestidas de validez, a partir de que son establecidas por procedimientos y órganos adecuados, y que deben ser generalmente eficaces; y de principios que establecen objetivos, metas, propósitos sociales, económicos, políticos entre muchos otros.
Tiene como función la de ser un sistema de control social, dirigiendo y guiando las conductas de los miembros de la sociedad, supervisando el funcionamiento de las otras instituciones sociales, y resolviendo los conflictos, frente a los cuales el Derecho cumple funciones de orden, aseguramiento de la paz, la garantía de los derechos y libertades, mediante la vigilancia y represión de las conductas desviadas.
Aceptando que la sociedad actual es una sociedad en transformación, el Derecho de las sociedades modernas es también un Derecho en transformación, para adecuarse , dirigir e introducir los cambios en las normas cuando así lo requieran, para lograr su debida eficacia.
El Derecho además, debe aspirar a realizar el valor justicia, tanto en el sentido de valor supremo, como en el más actualizado de valor social, que se relaciona con el criterio que se puede utilizar para valorar un sistema jurídico, al lado de otros valores a que debe aspirar, como la libertad, la igualdad, etc. Page 3
Si sostengo que el Derecho...
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