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Vinos / Vinos con carácter

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Vincent
AutorRodolfo Gerschman

VALENCIA, España.- Para un extranjero no acostumbrado a las sutilezas del alma española le parecerá incomprensible esa rivalidad tan a flor de piel entre valencianos y catalanes. Hablan la misma lengua, tienen similar predilección por arroces, pescados y mariscos y elaboran vinos con iguales cepas como Monastrell o Tempranillo. ¿Qué más necesitan para contentarse?

Al cabo de un rato el extranjero comienza a valencianizarse y aprende a ver las diferencias. Una de las más notables para mis escasos conocimientos sobre el tema, es que aquí la gente se siente más española. Y sienten que sus vecinos lo son mucho menos. Un indicio es la mayor adhesión valenciana al uso del castellano.

Por cuidado de identificación, orgullo o porque su prosperidad actual así lo promueve, Valencia se está también reinventando.

Lo señala la imponente Ciudad de las artes y las ciencias, tal vez lo más impresionante que he visto en materia de arquitectura hasta ahora -realizada por Santiago Calatrava- y la bella remodelación del puerto, que visité para la regata 32 America's Cup. Otro hito fue la primera edición de Vinoélite.

Esta feria reunió a unos 120 productores y, a diferencia de otras, giró alrededor de la presencia de los grandes vinos, reforzada ésta por el grupo Primum Familiae Vini, que reúne desde hace 14 años a importantes familias productoras de vino: Álvarez de Vega Sicilia, Drouhin de Domaine Drouhin, Roger del champagne Pol Roger, Torres, Antinori, Inciso Della Roqueta, Perrin de Château de Beaucastel, Huguel de Alsacia, los Rothschild de Château Mouton Rothschild, Egon Müller, Symington de Oporto.

En una época estuvo Mondavi y seguramente ya no desde que vendió su bodega. O sea que Primum Familiae Vini reivindica la importancia de la propiedad familiar en las empresas dedicadas a la elaboración del vino al mismo tiempo que grandes grupos multinacionales abarcan tajadas cada vez más grandes de la industria.

El evento más esperado fue entonces la cata de los vinos de Primum Familiae, dirigida por sus propietarios. Allí volví a probar -les hablé de ello en la columna pasada- el Vega Sicilia Único 1996, y reafirmé aún con mayor entusiasmo lo extraordinario de esta cosecha, que terminó sobresaliendo entre los demás.

Me parecieron entre muy buenos y...

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