Transhumanismo, naturaleza animal y derecho
| Autor | Liliana Fort Chávez |
| Cargo | Doctora en Filosofía del Derecho, Profesora-Investigadora del Departamento de Derecho, UAM-A. |
| Páginas | 105-136 |
Investigación
105
Sumario: Introducción
los animales / II. Evolución biológica / III. Organismos y sociedades / IV.
Transhumanismo, naturaleza animal y
derecho
Liliana Fort Chávez*
La crueldad hacia los animales es signo
característico de los pueblos degenerados y
de la gente ignorante y vulgar.
Alexander Von Humboldt
* Doctora en Filosofí a del Derecho, Profesora-Investigad ora del Departamento d e Derecho, UAM-A.
Resumen:
El tran shumanismo es tá de moda, es la utopía del moment o. Sin embargo, esto no es nue-
vo. Hoy se presenta con promesas renovadas. Sin embargo, la falta de autoconocimiento
-
coactivo de la conducta”. Sin embargo, saber que somos organismos autopoiéticos y que
el mundo del autoconocimieto en donde las leyes de protección a los animales racionales
con la legislación al respecto en México.
Abstract:
Transhumanism is fashionable, it is the utopia of the moment. However, this is not
new. Today it is presented with renewed promises. However, the lack of self-knowledge
and debate when laws are made has left us with an instrumentalist understanding of
the world, such as the one we see under the disciplinary not ion of law as a “coercive
order of conduct.” However, knowing that we are autopoietic organisms and that we
can organize ourselves to preserve the organic future in symbolic language, or else,
that we can fall under fantasies with imposed language, gives u s the possibility of
choosing the world of self-knowledge where protection laws to rational animals or are
not eective, or to let animals continue to be objects of prot, as is the case with the
legislation in this regard in Mexico.
106 alegatos, núm. 110, México, enero-abril de 2022
Introducción
presenta con promesas renovadas, no encuentra competencia, excepto en el
campo renovado también de la religión.
El principal reclamo del transhumanismo radica en
sectores de la población en los países más desarrollados; deseos un
tanto difusos, que el transhumanismo ha tenido la habilidad de cen-
sin embargo, se presentan como seguros y de disfrute irrenunciable
para quienes buscan novísimas formas de consumo o estar simple-
mente al día respecto a lo que la tecnología marca como la siguiente
oleada de avances.1
Se convierte, así, en el único proyecto de salvación laica, pretendidamente
que no los obliga a ninguna renuncia inmediata, ni a cambiar demasiado sus
formas actuales de vida y de pensamiento.
tiende a una nueva era. Sin embargo, los ideales transhumanos no convul-
sionan al mercado. Todos siguen consumiendo lo que ofrece el mercado.
Nadie tiene noción de la i nmortalid ad de las especies, sino solo noción de
la inmortalidad del propio cuerpo. Para superar el pensamiento fundamen-
talista, tanto del mercado como de las religiones, necesitamos el autocono-
cimiento como parte que somos de la dinámica interrelacional de todos los
procesos.
El transhumanismo se sitúa en la frontera entre lo real y lo imaginario, y
-
ción”, así como un repertorio de conceptos y de valores que impulsan prácti-
cas concretas encaminadas a la consecución de una nueva era.
Antonio Diéguez , Transhumanismo, la búsqued a tecnológica del mejoramient o humano, p. 15.
Investigación
107
inevitable. Se dice que la vida eterna no está en el más allá, sino aquí mis-
mo, al alcance de nuestra mano, y es la tecnología la que puede propor-
cionárnosla.
Antonio Diéguez recuerda que el transhumanismo no es una idea nueva
y
no solo desde el punto de vista físico, sino también desde el psicológico, el
2 Tiene razón, siempre y cuando se dife-
-
mita separar lo razonable de lo que de cuestionable hay en todo lo que se nos
promete.
Necesitamos dialogar con las diversas voces que sostienen que ha
-
sus manos, efectuando las transformaciones mediante la interven-
ción directa e interna en los individuos. Como ya se está haciendo en
las plantas y animales.3
Sin embargo, hay quien sostiene que ya llegó la hora de que el ser humano
tome el control de su propia evolución y haga de ella una evolución dirigida
para tomar decisiones y nombrar las cosas del mundo logre autoconocerse.
Esto puede alcanzarse en la educación y la comunicación pública que con-
cientice a cada hablante de que la evolución es obra de todos y podemos re-
organizarla. Muy diferente será, si toman este poder de tomar el control de la
segundo caso, la evolución biológica, basada en la selección de variaciones
-
lución basada en la tecnología y dirigida por los fundamentalismos religiosos
Ibidem., p. 21.
Ibidem., p. 22.
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba