Steve Carell: Y Dios lo hizo... ¡comediante!

AutorEduardo Molina

En menos de dos años, Steve Carell ha pasado de comediante poco conocido a estrella internacional del cine y la televisión.

Mientras otros actores cómicos como Ben Stiller, Jim Carrey y Will Ferrell empezaron a cosechar éxitos desde jóvenes, Carell lo hizo entrado en sus 40.

Y fue precisamente con la cinta Virgen a los 40 (2005) cuando su carrera despuntó.

El mismo año, su serie The Office (adaptación televisiva norteamericana del éxito británico) empezó a conquistar televidentes en todo el mundo.

El año pasado demostró además ser un excelente actor serio interpretando a Frank, un maestro universitario gay con tendencias suicidas en la cinta nominada al Óscar Pequeña Miss Sunshine (2006).

Este verano tiene a Dios de su lado, por lo menos en la pantalla grande, ya que protagoniza El Regreso del Todopoderoso, secuela del filme que su colega Jim Carrey realizó en el 2003.

Carell, de 44 años, repite su personaje del filme original, Evan Baxter, sólo que ahora es "promovido" a protagonista.

Para los que no lo recuerden, Carell tiene una de las escenas más chistosas del filme original, cuando se le traba la lengua al aire leyendo las noticias, cortesía de los poderes de Carrey.

En la nueva cinta su personaje deja el mundo de los noticieros para entrar al de la política y traslada a su familia a Washington cuando recibe un cargo de congresista. Es ahí cuando Dios (Morgan Freeman) se le aparece para pedirle que construya un arca, como la de Noé.

"Soy católico, y es interesante ya que eso no me empujó a hacer la película. La hice debido a que tenía un gran mensaje", dice en una sala de los Estudios Universal en Hollywood.

"No la veo como una película religiosa, es una película sobre generosidad y sobre estar al pendiente de la tierra y el medio ambiente; sobre el descubrimiento de un solo hombre y de darse cuenta de qué es importante para él y lo que puede poner de su parte".

Los efectos especiales y el utilizar animales reales en el rodaje ha hecho que la cinta tenga el distintivo de ser una de las comedias más caras en la historia del cine. Su costo estimado se aproxima a los 175 millones de dólares.

"Estoy consciente de que es una película muy cara. No soy productor, por lo que no estoy envuelto en ese lado", asegura. "Pero creo que tiene el potencial de ser dulce y una cosa que la familia entera puede disfrutar, no una película para niños donde los papás se aburren, sino algo para llegar a varias generaciones".

Sus coestrellas peludas

Hay un...

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