El rostro del martirio

TLAQUEPAQUE.- Rita Martínez se veía reflejada en el llanto de María, la madre de Jesús. Martínez perdió a su hijo Rogelio, quien murió a los 32 el año pasado. Por eso le prometió acudir a la Judea en Vivo de San Martín de las Flores.

"Tiene poco que falleció. Yo lo estuve trayendo (a la Judea) vengo como una promesa que le hice a él. Así que mientras pueda voy a venir.

"Veo a María como llora y eso me llega", expresó.

Como ella, millares de católicos acompañaron ayer la edición 225 de la Judea en Vivo, en San Martín de las Flores.

Ante un sol sofocante, que a partir de las 15:00 horas dio una temperatura de 32 grados centígrados, los creyentes permanecieron expectantes ante cada escena del Viacrucis al que dieron vida 100 actores que participaron.

Vieron a un Jesucristo flagelado por los soldados romanos y con tintes de sangre sobre su cuerpo, que no los dejó indiferentes. Se apropiaron de la historia, del dolor, y de la injusticia que atestiguaban sin poder impedirla.

Sentados sobre las gradas del atrio del Templo de San Martín Caballero, o de pie sobre las delimitaciones del escenario refrendaron su fe.

A las 18: 30 horas el Cristo...

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