PYMES una esperanza en el crecimiento de México
| Autor | C.P.C. Luis Núñez Álvarez |
| Cargo | Profesor Investigador |
| Páginas | 61-61 |
61
contaduriapublica.org.mx
ECONOMÍA GLOBAL
C.P.C. Luis Núñez Álvarez
Profesor Investigador
PYMES
UNA ESPERANZA EN EL CRECIMIENTO DE
MÉXICO
Desde hace algunos años y habiendo dedicado mucho tiempo a la investigación sobre el nacimiento, crecimiento y
desarrollo de las PyMES, estudio que he realizado, tanto en el estado de Guanajuato como en el de Colima, llego
a la conclusión de que tal como lo han dicho las autoridades en México, así como muchos organismos cúpula en
nuestro país, son las entidades que generan más mano de obra.
Por consiguiente, no se debe desechar la aportación que en el desarrollo del país hace este tipo de empresas. ¿Por
qué digo que son una esperanza en el crecimiento de México?
La esperanza la podemos ver desde tres puntos de vista: la gente la relaciona con el momento de irse a descansar
después de haber laborado un largo día, llegar a casa con la esperanza de tomar un baño, merendar, ver una película
y tener un grato sueño; cuando se vive dentro de un ambiente de conflictos como la inseguridad, violencia, los
robos, la escases de empleo, hay la esperanza de salir de ese bache y disfrutar de buenos tiempos y alcanzar sus
objetivos, que le den a las personas, mejor calidad de vida; la esperanza es ser una persona optimista, tener ambi-
ciones, enfrentar nuevos retos y ser cada día mejor.
Así, los empresarios de las PyMES deberán vivir en la esperanza, viéndola como la oportunidad de vencer la incer-
tidumbre, de aprovechar las oportunidades, encarar los grandes retos (cambios estructurales en la forma de hacer
negocios, en lo que ofrece el mundo globalizado, en las mejoras continuas que habrá que hacer en la manera de co-
mercializar, elaborar productos de calidad), y vencer la incertidumbre de los cambios constantes del mundo actual.
La administración Federal actual, aún con los golpes inciertos que ha dado en cuanto a las reformas estructurales
aprobadas en sus dos primeros años de gestión, por ejemplo: educativa, hacendaria (que ha dejado mucho qué
desear), telecomunicaciones, energética (muy discutida y cuestionada), así como las reformas políticas que se han
planteado, a fin de llevar un mejor proceso democrático en el próximo año. Sin embargo, en lo referente a la ener-
gética, aun con la aprobación de las leyes secundarias, hay dudas respecto a cómo será el proceso de otorgamiento
y concurso de contratos en lo referente a exploración, explotación, producción y refinación de petróleo, ya que
pronto arribarán las grandes compañías petroleras y se teme un apoderamiento del petróleo mexicano.
Con ese tipo de cuestiones, las PyMES deben verse inmiscuidas en el nicho de oportunidades que se puedan
generar con la aplicación correcta y bien regulada, de las actividades que habrán de derivarse del nuevo proceso a
seguir en las telecomunicaciones, en la explotación del gas, del petróleo y de la energía eléctrica (la eólica, con el
uso del gas natural), ya que esos cambios requerirán de la elaboración de diversos bienes y servicios, para que toda
la maquinaria necesaria para los cambios estructurales, se puedan llevar a cabo en forma más competitiva, no solo
en el terreno nacional, sino también, en el terreno internacional.
Las PyMES desde hace muchos años, han sido bandera de diversas administraciones federales, estatales y muni-
cipales, porque han visto en ellas (como ya lo expresé) las empresas que más mano de obra emplean (se habla hasta
de 72% de ocupación de la población económicamente activa en México). En consecuencia, este tipo de empresas
no solo deberán aprovechar los nichos de oportunidad que se vayan presentando, sino que deberán aprender a
utilizar y saber cómo hacerse presentes en los diferentes programas que los gobiernos proclaman tener listos para
ser utilizados por los empresarios de este tipo de entidades productivas.
Ya en otras de mis aportaciones a Contaduría Pública, he comentado que el campo de oportunidades para las Py-
MES no solo está en México, sino también en Asia en un campo que requiere de bienes y servicios para satisfacer
sus grandes demandas, ya que su población es enorme y sus necesidades por satisfacer son la oportunidad que
deben aprovechar nuestros empresarios, sin escatimar esfuerzos ni perder la esperanza para el logro de nuevos
objetivos, ya que al final de la jornada existirá la esperanza de haber conseguido lo propuesto.
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