Proyectos con pasión
| Autor | Staff, Fernanda Ramón y Angélica Ochoa |
La función vital de la arquitectura y el interiorismo en la vida del ser humano será expuesta por cuatro creativos mexicanos que participarán en el Segundo Foro Entremuros, Proyectos con Pasión.
El arquitecto Víctor Legorreta, titular del despacho LEGORRETA; la arquitecta Azul Hicks, Directora General de Azul Hicks Atelier de Arquitectura; la arquitecta Nora Toscano, fundadora del Taller de Arquitectura Nora Toscano, y el arquitecto Juan Ignacio Barragán, director de URBIS Internacional, compartirán su visión creativa y su filosofía profesional con los asistentes al Foro.
El evento, dirigido a arquitectos, interioristas, estudiantes y público interesado en el tema, tendrá lugar el miércoles 31 de mayo en las instalaciones del periódico El Norte.
Para más información e inscripciones visita la página www.foroselnorte.com
Trasciende fronteras
En el mundo de la arquitectura el sello Legorreta está arraigado a la mexicanidad y a la vocación de construir espacios que satisfagan las necesidades de una sociedad y que contribuyan a la construcción de mejores ciudades.
En Monterrey, el Museo Marco, el Hospital Zambrano Hellion, la EGADE Business School del Tec de Monterrey, entre otras obras, son prueba de ello.
El arquitecto Víctor Legorreta se integró en 1990 al despacho iniciado en 1965 por su padre, el arquitecto Ricardo Legorreta, y desde entonces hasta la muerte del fundador de la firma en el 2011, diseñaron juntos diferentes proyectos.
Con Víctor Legorreta al frente, el despacho sigue siendo un referente de la arquitectura mexicana.
El creativo señala que su padre estaba interesado en proyectar a México en el extranjero como un país sofisticado, y quitar el estereotipo que a veces se tiene de que el país es sólo cactus y burros y han dado a conocer la fuerza de México en el área arquitectónica a través de obras en Europa, Asia, Latinoamérica y Medio Oriente.
Como "humana" define el artífice la arquitectura del taller, pues asegura que lo que más les importa es que la gente que vive en los edificios y casas que diseñan los disfrute al máximo todos los días.
"De ahí viene que nos guste la luz natural, el manejo del agua, el buscar otro tipo de sensaciones, como, por ejemplo, el misterio, las emociones de alegría o de sorpresa, que de pronto entres a un pasillo y sorpresivamente llegues a un patio. Todo esto lleva a que el ser humano siempre es el centro de nuestra arquitectura", asegura.
Esta labor, de más de 50 años ya, sigue dando frutos y...
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