Empresa/ Más Pidiregas
| Autor | Alberto Barranco Chavarría |
La gran variante, en tal caso, a contrapelo del obstinado rechazo del régimen anterior a la participación del Congreso en la supervisión de los contratos, alegando que a fin de cuentas no se aportaría medio centavo del presupuesto... por más que las deudas asciendan en este momento al equivalente a 2 puntos del Producto Bruto Nacional, es que el actual convertirá la posibilidad en obligación.
¿Se acuerda usted las acres discusiones entre los Diputados de oposición y el ex Secretario de Hacienda, José Angel Gurría, en el obstinado ocultamiento de las rendijas del construya hoy y le pagamos después... con los flujos generados por las propias obras?
¿Se acuerda usted de las explicaciones técnicas sobre los esquemas de financiamiento del principal defensor del marco, es decir, el ex Subsecretario de Ingresos de Hacienda, Santiago Levy?
Ahora que la pretensión de cuenta nueva sin borrón implica en paralelo una fórmula distinta de financiamiento, por más que se mantenga intacto el aval del Gobierno federal, bajo la cual la constructora privada pacta la recuperación de su inversión por dos vías: la celebración de un contrato de arrendamiento y el pago de servicios.
El ejemplo más nítido del rumbo del esquema lo constituye el proyecto otorgado por licitación pública a un consorcio integrado por tres firmas: la mexicana Grupo Consorcio de Fabricaciones y Construcciones, CFC, encabezada por Félix Cantú, la canadiense Westcoast y la japonesa Marubeni.
Estamos hablando de la construcción de una plataforma de comprensión de gas natural que se levantó a la vera del Complejo Cantarell de la Sonda de Campeche, con una inversión de 250 millones de dólares, y se encuentra en proceso de pruebas.
Construida totalmente en los patios del grupo CFC en Tuxpan, Veracruz, la obra plantea reducir la quema del combustible cuyo precio se fue a las nubes en el último año, para plantear su comercialización.
La posibilidad habla de 270 pies cúbicos diarios, que se transportarían vía ductos submarinos hasta la planta criogénica de Cactus, Chiapas.
Lo interesante, en tal caso, es que la colosal plataforma levantada bajo el marco del proyecto Akal-GC, se plantea como propiedad de Pemex, por más que la empresa pública no puso en la mesa ninguna inversión.
La amortización de ésta se realizará bajo la fórmula de pago de servicios.
Bajo el mismo esquema, Petróleos Mexicanos está planteando la rehabilitación de los sistemas de proceso, eléctrico y misceláneos en plataformas de...
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