Opinión Invitada / Emiliano Sánchez: Con la basura al cuello
| Autor | Opinión Invitada |
Durante lo que va de junio hemos leído en EL NORTE cómo nuestros rellenos sanitarios están a punto del desborde y completamente fuera de norma.
Hay un colapso en la gestión de la basura urbana. El camino habitual de la opinión pública será culpar al Gobierno, pero ¿pretendemos seguir ignorando nuestra lógica de producción y consumo?
Porque sí: es responsabilidad del Estado el manejo de nuestros desechos. Pero 5 mil toneladas diarias de basura pasan más a definirnos como sociedad.
Y esto es únicamente lo que recibe Simeprode. Faltan 39 rellenos operando en el Estado, más un número desconocido de tiraderos clandestinos y lo que se desecha en terrenos baldíos, ríos o es quemado a diario.
No podemos con la cantidad de basura que producimos, somos una sociedad no sostenible y sucia.
Con un sistema para el procesamiento de desechos financieramente lastimado y toneladas de residuos expuestos al aire y la lluvia, pagamos un alto costo ambiental: flora, fauna, mantos freáticos y nuestra lastimada calidad del aire, sufren este mal manejo.
Al no cumplir con la NOM-083 de la Semarnat, cubriendo los residuos recibidos diariamente, los confinamientos de Simeprode, basureros a cielo abierto, se convierten en una fuente contaminante de área, liberando partículas PM10 al ambiente e incluso PM2.5, cuando ocurren incendios.
Mientras Estado y municipios malabarean para lidiar pobremente con las marejadas de desechos que se avecinan diario, veo a muy poca gente planteándose producir menos basura. El uso de desechables en reuniones y en la vida diaria, es hoy común denominador, "porque es más fácil". Los comercios, igual.
¿Por cuánto tiempo usamos un desechable en contraste con su proceso de producción y venta, su manejo al ser desechado y el tiempo que permanece en el ambiente? Es antieconómico.
La cuestión es que no sólo es más fácil. También es más barato. Y cuando hablamos de negocios, la lógica se reduce a bajar costos. Aquí sí: necesitamos legislación, y que se haga cumplir.
El Estado, ente mediador entre el interés público y privado, ha prohibido el uso de bolsas plásticas y popotes, en supermercados y restaurantes. Sin embargo, estos agregados a la Ley Ambiental de Nuevo León entran en vigor hasta 2020.
Sobre el unicel, material que ocupa 15 por ciento del volumen en los rellenos sanitarios (INECC) y que tiene una vida útil en ocasiones apenas de minutos, sólo se habla de promover la investigación y el uso de tecnologías para prevenir, controlar y abatir...
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