Miguel Carbonell / Una propuesta contra la inseguridad
| Autor | Miguel Carbonell |
A pesar de la intensidad inédita de la movilización social en torno al tema, todavía son muy escasas las propuestas concretas que se han generado para combatir la inseguridad pública. Alguna buena idea se puede sacar si ponemos atención a lo que se está haciendo en países que tienen problemas parecidos. Propongo que miremos a Brasil y específicamente a una idea que le está dando muy buenos resultados al gobierno del Presidente Lula.
A principios de julio, el gobierno brasileño aprobó el Estatuto de Desarme, que tiene varios objetivos. Entre ellos figura el castigo para quienes posean armas de fuego sin autorización o trafiquen con ellas. Es lo mismo que hace nuestra Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos. La novedad, sin embargo, consiste en que se ha creado un programa de entrega voluntaria de armas por parte de la población. El Gobierno ha establecido que por cada arma que se entregue se otorgará un pago de entre 40 y 400 dólares, dependiendo del estado que guarde y del tipo de arma de que se trate.
A juzgar por sus resultados (de los que el periódico La Vanguardia daba noticia en su edición del 1 de agosto de 2004), el programa está siendo todo un éxito. En sus primeros nueve días de funcionamiento se habían entregado más de 17 mil armas de fuego. Según una encuesta reciente, el proceso de desarme es aprobado por una amplia mayoría de brasileños (más del 67 por ciento de los encuestados dijo estar a favor del programa). El éxito ha sido tan grande que el gobierno de Lula se está planteando aumentar el fondo para compensar la entrega, que era inicialmente de casi 4 millones de dólares.
Antes de hacerlo a nivel nacional, la experiencia se había desarrollado en el Estado de Paraná, donde en los primeros meses del 2004 se habían recolectado más de 13 mil armas. Resultado: en las mismas fechas el número de asesinatos había disminuido un 30 por ciento.
¿Sería muy complicado iniciar un proyecto parecido en México? ¿No es tiempo ya de dejar los discursos y la demagogia y voltear a ver lo que están haciendo países parecidos al nuestro contra la criminalidad?
Lo mejor de todo es que el Estatuto de Desarme se propone como una escala intermedia. El propósito del gobierno de Lula es caminar hacia una prohibición total de armas de fuego en manos de la población civil. El Gobierno se está planteando realizar un referéndum en octubre de 2005 para preguntar a la población si está de acuerdo con la prohibición total de armas.
La lección de la...
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