Línea 10

CON lupa tendrá que verse el robo de la camioneta de la jefa delegacional en Cuauhtémoc.

Y es que no se trata nada más del despojo a mano armada que Lola Padierna sufrió a las puertas de su hogar el pasado domingo.

Es cierto que el robo de vehículo es común en las calles de la ciudad, pero no en las condiciones en las que se dio.

Nadie se roba una camioneta, a punta de pistola, sólo para quitarle tres llantas.

Es claro que a Lola le hicieron llegar un mensaje de que se ande con cuidado porque no es tan invulnerable como parece.

El asunto es grave, toda vez que se trata de una funcionaria que, por su forma de gobernar, se ha acarreado enemigos por todos lados.

Desde propietarios de giros negros, pasando por líderes de ambulantes y narcotraficantes.

Padierna se ha metido a terrenos de los que tradicionalmente no se hablaba mucho en público.

Se ha peleado abiertamente con líderes de ambulantes y ha señalado operaciones de narcos en Tepito.

Y eso desde luego que significa muchos riesgos personales.

SOBRE este asunto, la Procu capitalina no puede dejar de externar su preocupación.

Por un lado apoyan el trabajo de Lola, pero por otro no pueden garantizar plenamente su seguridad, pues se está metiendo con lo más bajo de la delincuencia organizada de la ciudad.

El mensaje del robo de su camioneta tiene algunas aristas.

Si le quisieron dar un susto, pues lo lograron.

Pero si se trató de un atracó normal, pues está más canijo ya que los delincuentes pudieron ver que Lola no tiene la gran protección.

Ojalá que el incidente sirva para llamar la atención y se tomen medidas más estrictas de seguridad, por...

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