De Javier Soberanes Romero

Señor director:

Si ya don Julio fue un educador asistemático y a veces incidental, un acto de justicia sería que desde su hereditaria pauta periodística se honrara su tenaz rectitud.

Aprovecho para saludar los testimonios incluidos en la edición de Proceso 1993, de 114 páginas, que más que una revista fue para mí...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR