Ante la inminente reforma laboral, ¿de veras se ha hecho ya un diagnóstico correcto?
| Autor | Ángel Guillermo Ruiz Moreno |
| Cargo | Autor e investigador nacional y de la Universidad de Guadaiajara |
| Páginas | C1-C2 |
Hoy día, el derecho del trabajo, debido al enorme impacto que tiene en la colectividad, se ha convertido en una estrategia política, económica y social de todas las naciones del orbe, sin importar su tamaño, ideología o tendencias, empero, en México paradójicamente el aspecto jurídico ha sido relegado a segundo término.
En efecto, la evolución incontenible del mundo hiper-tecnologizado en que vivimos ha trastocado no sólo nuestras vidas, sino que ha socavado de raíz muchas de nuestras instituciones clásicas que considerábamos inmutables y, por desgracia, esta realidad ha pillado por sorpresa no sólo a la clase política, sino a todos sin distingo, incluso a los propios juristas que pareciera somos incapaces de hacer un buen diagnóstico situacional acerca del derecho del trabajo, en la afanosa búsqueda de soluciones viables y factibles a nuestras sentidas problemáticas contemporáneas.
Interesado en el desenvolvimiento del derecho del trabajo en la llamada "América morena" -la cual he recorrido entera como Presidente Internacional de la Asociación Iberoamericana de Juristas del Derecho del Trabajo y la Seguridad Social-, he podido constatar que seguimos aferrados a viejos dogmas y lo peor es que hemos construido mitos y paradigmas basados en ideas obsoletas que funcionaban en tiempos pasados que nunca volverán. Para decirlo pronto: hemos sido rebasados por la realidad.
Esa sentida realidad nos demuestra a diario que una cosa es la teoría y otra la práctica; que es un espejismo la realidad virtual de los discursos bonitos y esperanzado-res de nuestros políticos, pero que la realidad "real" es lacerante y desesperanzados. Acaso sea cierto entonces aquella sabia conseja que afirma que "la realidad es más sabia que el derecho", aunque a nosotros los abogados nos repugne la idea.
Porque esa inquietante realidad, comprobable en la primera década del siglo XXI, ha rebasado ampliamente nuestras legislaciones sustantivas y procesales vigentes en material laboral en todos los países latinoamericanos, viviendo en un mundo de ficciones de normas legales viajas y obsoletas -tan inútiles como un radio de bulbos-, pensadas e instrumentadas para otros tiempos y otras circunstancias distintas a las actuales; legislaciones laborales que por motivos aún no del todo claros, no terminan por adecuarse a los difíciles tiempos que corren.
Es hora pues que pongamos los pies en la tierra, que dejemos de soñar y de pensar que las cosas se resolverán por sí solas como...
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