El fantasma del autoritarismo

AutorSabina Berman

El fantasma del autoritarismo. Es decir, la clave con la que un pacto nombrado explícitamente un acuerdo entre partes semejantes, se leyó como el encumbramiento de un presidente y la sumisión de los otros firmantes.

Los opinadores nacionales lo describieron admirativa o críticamente. Llegó quien sí sabe gobernar. Dioses, cómo extrañábamos el presidencialismo, sin siquiera saberlo. Qué capacidad operativa, en un mes Peña logró lo que los panistas no lograron en 12 años. Desbordado, un analista exclamó en el título de su artículo Habemus Presidente, como si acabásemos de descubrir en Enrique Peña Nieto a un ungido del Espíritu Santo y con poderes consecuentes.

O lo describieron críticamente, que era sólo describir los espacios negativos de la misma imagen autoritaria. Lo que veíamos era la traición de los presidentes de los partidos de oposición. Se vendieron al jefe mayor, como otrora lo hacían los falsos partidos en el presidencialismo. Se doblaron. Fueron cooptados. Desdibujaron las ideologías de sus partidos y los han convertido en sucursales del PRI.

Todo por un fantasma que no salía en la fotografía pero nuestra memoria de un siglo XX autoritario agregaba. Y es que a la sombra de la clave autoritaria, es impensable un acuerdo entre semejantes. Una alianza temporal para alcanzar ciertos fines. No: la mente autoritaria descree de la horizontalidad. Quién está arriba, quién abajo: es lo que quiere discernir. Quién domina, quién se supedita. Quién se eleva, quién se dobla. Quién gana todo, quién pierde y se queda con migajas.

Los fantasmas no existen pero pueden causar estragos tremendos. Es el caso de lo que ha ido sucediendo en los partidos firmantes.

En el PRD, el grupo bejaranista acusó a su presidente de no entender que la oposición consiste en oponerse sistemática y contundentemente al presidente de la República. Lo acusaron también de tratos oscuros y corruptos. Y últimamente en Guerrero, los maestros inconformes con la reforma educativa, pintarrajearon la sede del PRD con el lema "Traidor Zambrano".

En el PAN sucedió (sucede) lo equivalente. Los calderonistas acusan al presidente del partido de venderlos barato al PRI. Figuras emblemáticas se retiran del partido. No se alcanzan quorums en las asambleas. El Pacto por México le sirve al país, dice un panista, pero al PAN lo mata. Y en el Senado ya varios senadores panis-tas han declarado que harán caso omiso del pacto. Que el Pacto por México que firmó su...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR