Extravío del capitalismo actual (Segunda parte)
| Autor | C.P.C. y C.I.A. Beatriz Castelán García |
| Cargo | Académica de la División de Estudios de Posgrado FCA-UNAM |
| Páginas | 64-64 |
contaduriapublica.org.mx
64
HORIZONTES/
Extravío del capitalismo actual
(Segunda parte)
En concordancia con el mode lo evolutivo de Alison Jamies on, citado en
la primera part e de este artículo, en la ac tualidad resulta evidente qu e
las activida des del crimen organizad o han penetrado el mundo ent ero y
se han incrementado en f orma sensible, por medio de patr ones de pla-
neación estr atégica fundamentados en es tudios de fuerzas y debilida-
des, oportunida des y amenazas, en donde result a de particular interés
las oportunidad es que se ofrecen:
̂Las deficien cias en las diversas l egislaciones de cada p aís, que de
manera hábil y especí fica aprovechan lo s grupos criminales par a
infringir la ley o, en su cas o, minimizar las penas.
̂Influencia de grupos o ligárquicos en el gobierno de lo s estados
con el consecuente de bilitamiento e inacción de e stos, en
particular y/o en coor dinación con otros es tados.
̂Grupos oligárquicos rel acionados con las mafia s que colaboran
con ellas, por medio de sus r elaciones y obtienen jugos os
beneficios con c apacidad para ret ar al Estado.
̂Concentración d e riqueza y decisione s en un pequeño grupo
internacional de acaudalados que influyen en decisiones de
negocios, financ ieras e inclusive de es tados a nivel global.
Alrededor de un millar de fir mas y hombres a nivel interna cional
detentan más de 80 % de las finanzas y economía mun dial.
̂Creciente corr upción que hace penetr ables las frontera s y los
gobiernos mediante to do tipo de colusiones.
̂Revolución tecnológica que permite opera ciones financieras
instantánea s múltiples durante todo s los días sin seguimiento,
con el efecto pe rmiso del paso de rec ursos de procedenc ia
dudosa al flujo legal y de man ejos especulativo s en donde pocos
ganan y muchos pierden.
̂La ventaja que signif ica para cier tas organizacione s e
instituciones —financier as, en general— tener una “macro
importancia” e s que para los países y el sis tema son too big to
fail and too big to jail; por lo ta nto, en casos problemát icos son
tratadas con particular benevolencia.
̂La relajada normat ividad de las instit uciones financiera s a nivel
internacional para f acilitar sus flujo s de recursos con débile s
controles y esc asas sanciones, l o que permite a los negoci os
turbios encontrar un a forma de incorporac ión hacia lo oficial sin
efectos par a los grandes bancos.
De ahí se observa q ue la política económica mun dial ha ido más allá de
los principios del ca pitalismo original, ubicando al mundo y su pobla -
ción, en general, fren te amenazas incontrola das de diversa índole com o
son:
̂Falta de empleo, empleos no remunerativos, empleos sin
prestaciones soc iales, empleos temporales con jornadas
extenuantes que, indiv idualmente, y desde luego, en
su conjunto, conducen a modalida des diversas de fall as
concentración en la t area y de cansancio c rónico.
̂Deterioro ambiental que afect a la salud y el rendimiento laboral.
̂Presencia de accio nes criminales de dist ribución y venta de
droga, de armas, de per sonas; juego, usura, f alsificación,
contrabando y otr os, que penetran en la soc iedad, aprovechando
sus carencias, o bie n, con violencia y corrupc ión, pero, en general,
en ámbitos permisivos y s in sanción.
̂Inseguridad crec iente producto de r obos, extorsione s, fraudes y
otros ilícitos que c ada día se presentan en for ma más frecuente
como producto de una in sidiosa delincuencia no con trolada.
De aquí resulta indudable el planteamiento sobre la importancia de
transcender el enf oque limitado de lo normal y na tural frente a es ta fase
de deterioro crí tico que se vive y percib e y no permitir encontr arnos en la
situación señalada po r el filósofo coreano -alemán Byung- Cul Han:1 “Nos
hemos convertido e n verdugos y víctimas de no sotros mismos”. En este
sentido, podremos or ientarnos a una nueva etapa de capi talismo con
confianza en lo público, con p reocupación y ocupación en l o ecológico,
allende la dimensión individual, p ues nos afecta lo que o curre en nues-
tro entorno socia l-económico, mediante acci ones individuales y colec ti-
vas con orientac ión y valores éticos alejados de la codicia , basadas en
acciones positi vas entre nosotros y en la vo luntad férrea de no dejarno s
corromper ni part icipar en la corrupc ión que nos aqueja, debido a que s u
avance afect ará, sin duda, desde la sobe ranía del país hasta alg o funda-
mental que es nuest ra libertad indiv idual y profesional; por lo tanto, no
debemos permitir se r verdugos y víctimas d e nosotros mismos.
1 Babelia, Entrevista de Francesc Arroyo, p-4-5. El País 22.03.14.
C.P.C. y C.I.A. Beatriz C astelán García
Académica de la Divisió n de Estudios de Posgrado
FCA-UNAM
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba