Degrada la moral demanda de sangre

AutorMaría Elena Medina

EL NORTE / México

El presidente de Transparencia Mexicana, Federico Reyes Heroles, apoya la decisión del equipo de Vicente Fox para no emprender una cacería de brujas contra los casos de corrupción del Gobierno saliente.

Si bien opina que al Gobierno foxista le toca revisar la Cuenta Pública de la administración saliente y por ley deben ser perseguidos los casos de corrupción, Reyes Heroles apoya la intención expresa del ex Gobernador panista Francisco Barrio -recién designado por Fox como coordinador para el combate a la corrupción- de no buscar la corrupción de este Gobierno, sino mirar hacia el futuro.

"Si uno atiende al llamado de la sangre nunca acaba", asevera el titular del capítulo México de Transparencia Internacional, un organismo no gubernamental de carácter mundial cuyo principal objetivo es combatir la corrupción.

Advierte que denunciar este tipo de escándalos a diestra y siniestra puede ser una medida popular, pero a la larga provoca un efecto depresivo en la opinión pública que finalmente se convierte en un "boomerang" para el Gobierno. Al cabo de tres años, la población concluye que "todos son iguales".

"Hay una cierta tentación, inclinación, por parte de las nuevas administraciones a lanzar una especie de cacería de brujas. Las cacerías de brujas venden bien los primeros meses, los primeros años, pero el efecto sobre la opinión pública, a la larga, es negativo, esto está bastante estudiado", asevera.

"La arena política es muy demandante de sangre, aunque a la larga, el efecto sea de degradación de la moral ciudadana".

El problema de la depresión estriba en que no se da a conocer el caso de un funcionario honesto por cada caso de corrupción, y eso desbalancea la percepción de la población.

Reyes Heroles se pregunta en qué ciclo depresivo se encuentra la sociedad mexicana después de los tres últimos sexenios, en los que se han expuesto sistemáticamente y en altoparlante los casos de corrupción pública.

"La opinión pública en relación a la corrupción está en el piso. ¿Y los miles de funcionarios honestos que también los hubo en la gestión de De la Madrid, de Salinas de Zedillo, los no-escándalo?. ¿Qué le dijimos a la sociedad de los no-escándalo? Absolutamente nada", sentencia.

El politólogo recibe con gusto la noticia de que Francisco Barrio -con quien se reunió el jueves- reciba la encomienda del equipo transición contra la corrupción, pues se necesita un hombre convencido de la problemática de luchar contra este problema y...

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