Dan alternativas para compartir
| Autor | Bertha Wario |
REFORMA / Nuevo León
MONTERREY.- Mientras se desprenden las últimas hojas del calendario, una fibra en el interior de las personas queda al descubierto y los hace fijarse en las necesidades ajenas. Porque si bien es cierto que en diciembre se desborda el consumismo, también ocurre lo mismo con la generosidad.
Aunque la ayuda nunca resulta suficiente para las organizaciones de asistencia social, por estos días la comunidad vive momentos de entrega como en ninguna otra época del año.
En el céntrico Banco de Ropa de Cáritas de Monterrey, por ejemplo, se incrementan los donativos hasta en un 40 por ciento. Es la temporada alta, se podría decir, en esta institución que dirige Alma Delia Machuca.
"La gente se porta muy generosa en estas fechas y se hace realidad la frase de que entre más das más recibes porque tenemos muchas peticiones de ropa por parte de gente que visita en estas fechas a comunidades de escasos recursos", comenta.
Aunque llegan a tener más de una treintena de solicitudes de hasta 2 mil piezas de ropa y 100 cobertores cada una, no rechazan ninguna. Durante esta temporada, excepto el 25 de diciembre y 1 de enero, únicos días en que permanece cerrado, el Banco de Ropa no descansa.
Una Actitud Cristiana
Se trata de una actitud que sin duda, está marcada por el sentido cristiano del nacimiento de Jesús, comenta Blanca Maiz de Lara, quien participa en el capítulo regiomontano de la Asociación de Procuradores de Fondos, de la cual se desprende también el Círculo de la Filantropía.
"Retomamos el nacimiento de Jesucristo para decir que venimos al mundo a darnos, a servir, y se busca que en esta época la familia se una y se sensibilice a las necesidades más cercanas", dice.
Una realidad es que, durante esta época, hay un incremento de mendicidad en las calles y cruceros. Ancianos y personas discapacitadas desafían las avenidas transitadas y el frío a cambio de unas monedas que, en esta época, casi nadie se niega a entregar.
Aunque signifique un atentado a la conciencia moral del conductor o el transeúnte, la recomendación es no dar limosna, señala Maiz de Lara.
"Es mejor orientar a estas personas hacia donde les pueden ayudar y para eso es recomendable saber a dónde los podemos enviar para que reciban la ayuda que están pidiendo", comenta.
Como fundadora de Effeta, institución de educación especial que atiende a personas con discapacidad intelectual y a sus familias, a Maiz de Lara le tocó en su momento, solicitar donativos en las...
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba