Y a los cuñados "cómodos" les dieron obra, fallaron, pelearon… y van ganando
| Autor | Arturo Rodríguez García |
En octubre de 2018 las constructoras GIA+ y Grupo Covasa vieron cancelado un megaproyecto hidráulico que les reportaría mil 600 millones de pesos. La razón: cuatro años después de haber obtenido el contrato habían avanzado sólo 10%, incumpliendo los plazos de terminación, por lo que, en pleno cierre de sexenio, la Comisión Nacional del Agua (Conagua) decretó la rescisión.
Meses después, el 23 de marzo de 2019, un incendio en la sede nacional del organismo arrasó con 101 expedientes de auditoría, entre los cuales estaba el del Túnel Chimalhuacán II, la obra cancelada mediante un procedimiento contra el que ya litigaban las constructoras mencionadas. GIA+ y Grupo Covasa son dos de las empresas ampliamente favorecidas por la administración de Enrique Peña Nieto en el Estado de México y, posteriormente, fueron de las consentidas de su gobierno federal.
La atención sobre GIA+ ha sido notable en los últimos años, pues, siendo una familia dedicada a la construcción, especialmente de vivienda, se convirtió en una contratista con participación en los principales megaproyectos de obra pública, un paso que suele asociarse con el parentesco: Hipólito y Jerónimo Gerard Rivero son hermanos de Ana Paula, esposa del expresidente Carlos Salinas de Gortari, y de Gabriela, esposa del exsecretario de Hacienda peñanietista José Antonio González Anaya. Por ejemplo, GIA+ obtuvo enormes contratos el sexenio pasado para obras carreteras; construyó y tiene concesionados al menos tres hospitales públicos; posee una prisión en asociación público-privada; tuvo el contrato efímero de la construcción del Tren México-Querétaro, cancelado en medio del escándalo de la "Casa Blanca", y participó en el ya cancelado aeropuerto de Texcoco.
En medio de la vorágine de contratis-mo que significó el Programa Nacional de Infraestructura de Enrique Peña Nieto, entre las obras destacadas se proyectó un sistema hidráulico para resolver el problema de las inundaciones en la zona oriente del Valle de México, es decir, la circundante al otrora llamado Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM).
En 2014 fue anunciada para GIA+ la adjudicación de la construcción del Túnel Chimalhuacán II -en consorcio con Grupo Covasa-, vía licitación pública por la Conagua, por mil 600 millones de pesos, pero no se realizó y terminó por cancelarse.
Hoy, el gobierno de la 4T enfrenta una demanda de indemnización por 800 millones de pesos, que el Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Administrativa está...
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