Coordenadas/ Lo que enseñó la Corte
| Autor | Enrique Quintana |
El que quiera azul celeste, que le cueste, dice un refrán. El que quiera democracia y modernidad, que pague las consecuencias.
¿Queríamos división de poderes real? Pues hay que reconocer que el Congreso es tan importante como el Ejecutivo y que los Senadores -por ejemplo- están en su derecho cuando impiden que el Presidente cumpla sus compromisos en el extranjero.
¿Queremos estado de derecho? Pues entonces hay que reconocer que la Suprema Corte de Justicia tiene la última palabra para determinar si una ley o reglamento es constitucional o no, como sucedió en el caso de la energía eléctrica.
No sé si le ha pasado a usted, pero a veces percibo entre diversos grupos, sobre todo en el sector empresarial, el deseo de que tuviéramos democracia y alternancia, pero que todo fuera como antes a la hora de las decisiones de Gobierno.
Que bastara con que el Presidente o los Secretarios quisieran algo para que el Congreso aprobara sin más o los Ministros inclinaran la cabeza.
Creo que en muchas ocasiones el Congreso se ha equivocado. Me parece que existe una desesperante incapacidad para ponerse de acuerdo en algunos temas fundamentales y un comportamiento que a veces hace pensar en una partidocracia en lugar de democracia. Pero ese es el Congreso que elegimos y que refleja las preferencias y la cultura política de los mexicanos.
En el caso de la Suprema Corte de Justicia, también pienso que a veces sus dictámenes pueden ser controversiales, tanto que ni siquiera entre los propios Ministros hay unanimidad. Pero finalmente es el poder el que tiene la función de impartir justicia y si dice que la reforma al reglamento eléctrico de Fox cometía un fraude a la ley y que debe echarse para atrás, pues hay que felicitarlos por tomar esa decisión.
¿Se imagina usted en la era de Salinas que la Corte hubiera bloqueado algunas reformas a las leyes o reglamentos? Era impensable, pues carecía del poder real para enfrentarse al Presidente.
¿Qué es más importante? ¿Tener inversiones por millones de dólares o tener estado de derecho? La respuesta es obvia y si para asegurar que la ley se aplica se pierden algunas inversiones en el corto plazo, le aseguro que a la larga van a llegar muchas más.
Para el Ejecutivo hay un aprendizaje y una advertencia. No puede meter por la ventana reformas que no logró colar por la puerta. Y el aprendizaje es que los asesores jurídicos de la Presidencia deben ser mucho más quisquillosos, pues por lo menos en este caso la Corte dictó que...
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