COORDENADAS / La renovación del equipo de SHCP
| Autor | Enrique Quintana |
Sin demasiado ruido, la Secretaría de Hacienda ha cambiado piezas clave de su alineación, principalmente con reacomodos internos.
Aunque no se ha movido su titular, en Hacienda han cambiado dos de los subsecretarios, una jefatura de Unidad, la coordinación de asesores y una Comisión tan relevante como la Bancaria y de Valores.
De los tres subsecretarios que conforman la Secretaría, salieron dos. Fernando Sánchez Ugarte, para irse al sector privado, y Ernesto Cordero, que fue nombrado Secretario de Desarrollo Social.
Sánchez Ugarte era un personaje atípico en el grupo pues no era especialmente cercano ni al Presidente Calderón ni al Secretario Carstens. Sin embargo, su salida resultó sorpresiva pues, por lo menos nominalmente, fue el responsable directo de la reforma fiscal en su calidad de subsecretario de ingresos.
Alguno diría que dio a luz al IETU y allí les dejó la criatura para que otros la atendieran.
El caso de Cordero es completamente diferente.
Es uno de los hombres más cercanos al Presidente Calderón, pues trabajó con él desde el Congreso, luego en Banobras y fue subsecretario cuando el hoy responsable del Ejecutivo estuvo en la Secretaría de Energía el sexenio pasado.
Además, fue encargado de los temas económicos durante la campaña electoral. Entre otras encomiendas, él fue quien operó formalmente la invitación a Carstens para integrarse al nuevo Gobierno, adelantando su salida del Fondo Monetario Internacional.
Su rol como responsable de la operación del gasto público, en el año que estuvo en la subsecretaría de egresos, se entendió siempre a partir de la voluntad del Presidente de tener a alguien de toda su confianza en el manejo de los dineros públicos.
Ahora tendrá el control de una buena parte de la política social, que es uno de los asuntos prioritarios de la administración de Calderón. Cordero es alguien en quien confía plenamente el Presidente, tanto desde el punto de vista de sus habilidades de gestión como de su cercanía y entendimiento de sus intenciones en la materia.
Con un actuario y doctor en economía al frente de la Sedesol, la Secretaría tendrá un perfil mucho más técnico que político.
Pero, regresando a Hacienda, la salida de Sánchez Ugarte propició desde diciembre la llegada de José Antonio Meade a la subsecretaría de ingresos.
Quien fuera coordinador de asesores de Carstens fue una de las piezas clave para que la reforma fiscal saliera, pues se convirtió en el principal negociador de la Secretaría en el...
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