Caso Lozoya. Peña Nieto y Videgaray "no quieren que él hable"
| Autor | Diana Lastiri |
Para Miguel Ontiveros, abogado de Emilio Lozoya, el expresidente Enrique Peña Nieto y el extitular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) Luis Videgaray Caso son los principales interesados en mantener callado al exdirector de Petróleos Mexicanos (Pemex), cuyo caso permanece estancado ante las negativas del gobierno federal a aceptar el pago de la reparación del daño por los casos Odebrecht y Agronitrogenados.
Mientras la defensa del exfuncionario espera que el expresidente sea procesado por los actos de corrupción que denunció desde agosto de 2020, Lozoya permanece confinado a un pasillo dentro del Reclusorio Norte debido a que ya fue amenazado de muerte por quienes no quieren que hable.
En entrevista con Proceso, Ontiveros Alonso, quien también es investigador del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la Universidad Autónoma de Chiapas, advirtió que los 45 años que la Fiscalía General de la República (FGR) pidió le fueran impuestos a Lozoya como condena, significan casi una cadena perpetua, por lo que no dejarán de intentar negociar el criterio de oportunidad que solicitaron en Odebrecht y el acuerdo reparatorio de Agronitrogenados.
El abogado relató que su despacho actualmente sólo lleva dos casos para dar a cada uno la atención debida y en los que están acusados Lozoya, su madre, hermana y esposa.
"Poco pudor procesal"
El gobierno de Andrés Manuel López Obrador ha puesto la persecución contra Lozoya como ejemplo de la lucha anticorrupción. Sin embargo, para Ontiveros defender al exdirector de Pemex no representa para él un riesgo de que se le tome como "el abogado del diablo" por la 4T.
"Todo lo contrario porque en los dos hemos tenido una posición muy institucional en armonía con la política anticorrupción implementada por el presidente López obrador y de denunciar además, en armonía con la Fiscalía General de la República (FGR), un aparato organizado de poder enfocado en hechos de corrupción que se verificaron en el sexenio pasado. Entonces, más bien nos ven como aliados porque nos hemos tenido mucho diálogo con la FGR, y aunque estamos en proceso y no se ha materializado todavía nuestro objetivo, que es el que tenga oportunidad y el acuerdo reparatorio, sentimos que estamos trabajando en la polea con las instituciones y esa es una de los factores que más nos gusta en este caso", señaló.
Sin embargo, desde finales de 2021 el gobierno federal cerró las posibilidades de diálogo con la defensa de Lozoya. La FGR lo acusó de tener "poco pudor procesal" por ir a cenar a un restaurante de lujo cuando permanecía vinculado a proceso en libertad. La fiscalía entonces solicitó que se le impusiera la prisión preventiva justificada, medida que hasta ahora mantiene al exfuncionario en el Reclusorio Norte.
Para Ontiveros, no se trata de "una contradicción", pues la fiscalía no ha rechazado el criterio de oportunidad del acuerdo reparatorio. "No se opone, de hecho, nos ha señalado que basta con que haya una aceptación por parte de las instituciones del Estado en relación con el monto de la reparación del daño, monto que por cierto ya se señaló en la acusación y que está muy claro. Lo que no se le puede exigir a la fiscalía es 'ya no me acuses' o 'ya no hagas tu trabajo' en tanto yo logro el criterio de oportunidad".
Recordó las manifestaciones de la FGR para lograr el cambio de medida cautelar contra Emilio Lozoya y mantenerlo en prisión preventiva justificada, en las que el fiscal Manuel Granados Quiroz reprochó al exdirector de Pemex haber ido a cenar al restaurante Hunan.
"El poco pudor procesal no existe en materia procesal ni penal, bueno, en ningún lado del Código Penal ni...
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