Buscan captar mercados con nuevos servicios
| Autor | Yaotzin Botello |
REFORMA / Enviado
PUERTO VALLARTA, Jal.- En un recoveco de la Sierra Madre Occidental, donde los cerros adoptaron a las palmeras, se interna un grupo de personas para entregarse a las aventuras que la naturaleza le puede imponer. Ellos trabajan normalmente para una empresa en alguna parte del País, pero ahora se encuentran aquí, en un lugar desconocido para ellos y sin la distinción de sus puestos de trabajo.
De entre los árboles, los ríos y la terracería, mientras realizan un triatlón, saldrá una nueva forma de trabajar en equipo, donde incluso podrían destacar líderes que bajo condiciones normales de trabajo no se asomarían. Ciclismo, caminata y rappel son las actividades que conforman esta prueba deportiva, en la que además van avanzando a modo de relevos, sin llegar a un agotamiento físico.
El triatlón en la sierra es una de las actividades que organiza el hotel La Jolla de Mismaloya para las personas que llegan en viajes grupales, ya sea de incentivo (de descanso) o de convenciones (trabajo); funciona como los deportes de aventura con los que se promocionan algunas empresas, primordialmente las de descenso de ríos, para ofrecer terapias de grupo o cursos de liderazgo.
"Esta actividad ha sido muy bien aceptada por las compañías, pues es algo que no encuentran en otras propiedades. Por nuestra ubicación, somos el único hotel del destino que está en condiciones de ofrecer a la gente la oportunidad de estar en contacto con la naturaleza", comenta Santiago Gutiérrez, gerente general de La Jolla de Mismaloya.
De los hoteles en México, La Jolla de Mismaloya es el único con un programa especializado en grupos y convenciones que no pertenece a una cadena de hoteles; en él, el personal del establecimiento toma las riendas de la organización y desarrollo de los viajes de otras empresas.
Los programas para grupos y convenciones surgen por la necesidad de captar a otros mercados que todavía pueden viajar después de tantos tiempos de crisis, creados por los terroristas del 2001, la guerra, el SARS y, particularmente en Puerto Vallarta, tras el huracán Kenna de finales del 2002.
El porcentaje de personas que llegan a La Jolla de Mismaloya en grupos se ha duplicado en los últimos años. En el 2001 fue de un 4 por ciento del total de los viajeros que arribaron; en 2002, un 8 por ciento, y se estima que para el 2003 se eleve hasta un 19 por ciento.
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