Avanza hundimiento con operación de pozos
| Autor | Iván Sosa y Alejandro Ramos |
La crisis planteada por interrupciones cada vez más frecuentes en el Sistema Cutzamala, tiene otra faceta en la explotación incesante del acuífero, pues con pozos cada vez más profundos de más de 400 metros, prosigue el hundimiento de la Ciudad.
De acuerdo con Adrián Ortega, investigador del Centro de Geociencias de la UNAM, la Capital del País se hunde por la sobreexplotación del acuífero en promedio anual 10 centímetros; sin embargo, la zona con mayor riesgo se ubica en el Municipio de Chalco, el cual anualmente presenta un hundimiento en promedio de 44 centímetros, cuyo riesgo geológico también impacta a una zona de la Delegación Tláhuac.
Ortega aseguró que este fenómeno también provoca agrietamientos en el subsuelo lo que eleva la vulnerabilidad de la Ciudad y área metropolitana ante fuertes sismos o inundaciones por aguas negras.
Recientemente la Comisión Nacional del Agua (Conagua) informó que los hundimientos que se han venido documentando desde hace más de 60 años van ampliando su radio de extensión en la región oriente del Valle de México.
La dependencia federal agregó que las afectaciones mayores se tienen en los municipios mexiquenses Valle de Chalco, Chimalhuacán, Nezahualcóyotl y Ecatepec y las delegaciones Cuauhtémoc, Gustavo A. Madero, Iztacalco, Iztapalapa, Tláhuac y Venustiano Carranza. Según la Conagua estas regiones que tienen zonas donde los hundimientos alcanzan de 22 a 44 centímetros al año.
"Frenar el hundimiento representa uno de los mayores retos, porque requiere de una decisión de carácter metropolitano que no será fácil de consensuar", estimó el experto de TGC Geotécnicas, Enrique Santoyo, en el estudio El gran reto del agua.
Sin el hundimiento, subrayó el especialista del Instituto de Ingeniería de la UNAM, Gabriel Auvinet, no se hubiera necesitado el Túnel Emisor Oriente ni las reparaciones constantes en la Línea A del Metro, pero el fenómeno continúa.
Cada pozo llega a generar 40 litros por segundo, una producción que gradualmente decae.
"Se sospecha que en 30 o 40 años las dificultades serán múltiples, porque los pozos más profundos serán cada vez menos productores y el nivel freático baja de manera continua, lo que significa que las reservas están contadas", indicó el geólogo Federico Mooser.
Aun cuando la Ley de Aguas Nacionales prevé una veda de pozos, la Conagua, el Sistema de Aguas de la Ciudad de México y...
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