Arte, la puerta a otros universos

AutorAlma Elisa Ramírez Cano
Páginas64-64
Arte, la puerta
a otros universos
Al amanecer abrimos los ojos para
observar el mundo. La luz parece dar
formas y colores a nuestra realidad.
Estamos vivos, o creemos estarlo.
Miramos a nuestro alrededor y nos
sumergimos en la ilusión del tiempo y el
espacio, estamos frente a una obra de
arte, la vida, la creación.
Imaginemos, por ejemplo, que
escuchamos Imagine de John Lennon.
Cerramos los ojos y de inmediato llega a
nuestra mente la tonada y la letra:
Imagine there's no heaven
It's easy if you try
No hell below us
Above us, only sky
Imagine all the people
Livin' for today
Ah
Suspiramos. Mientras reconstruimos cada
uno de los sonidos y las palabras:
Imagine there's no countries
It isn't hard to do
Nothing to kill or die for…
Imagine all the people
Livin' life in peace
Respiramos profundamente mientras
recreamos con claridad el estribillo,
prácticamente lo cantamos con John
Lennon:
You may say I'm a dreamer
But I'm not the only one
I hope someday you'll join us
And the world will be as one
Por un instante nos convertimos en
artistas, creadores de nuevas realidades.
Seres capaces de imaginar mundos
distintos, nos fundimos con la creación
artística.
El tiempo parece detenerse, desaparece
el pasado y el futuro mientras leemos
con detenimiento. Pero sigue en nuestro
interior el coro de la canción:
You may say I'm a dreamer
But I'm not the only one…
Ahora parece que el tiempo fuera es
un ciclo en espiral, en el cual seguimos
cantando al unísono. Nos hemos
fundido con la obra de arte. Nos
observamos tarareando Imagine, mientras
proseguimos con la lectura.
Qué es el arte sino una recreación de un
aspecto de la realidad en la que alguien
se detiene, mira con atención, imagina y
plasma lo que vio y sintió ante un hecho
concreto. Une el pensamiento y la emoción
para mostrar un pedacito del mundo.
Dialogando con los niños, uno encuentra
formas sencillas de decir las cosas. Hablando
de qué es el arte, mi sobrina me dijo:
“Es como cuando tienes una idea loca
que da vueltas por tu cabeza. Piensas en
cómo convertirla en realidad, te imaginas
muchas formas. Experimentas…”.
Cuando estás frente a tu creación,
no se parece en nada a lo que habías
imaginado…
Es mucho mejor.
Con esa frescura me gusta ver el arte,
acercarme a él y apreciarlo desde
la sorpresa y el descubrimiento de
otras formas de ver el mundo. Borro la
distancia que hay entre el otro y yo. Me
uno al creador e imagino otras formas de
ver el mundo.
Nuestra observación del universo es
a través de la experiencia humana,
los sentidos y la memoria, ¿quién no
recuerda la cortina de cristal del Palacio
de Bellas Artes? Ese magnífico cristal en
tonalidades azules, verdosas, lilas hasta
un cálido naranja, dorado. Esas montañas
al atardecer. La luz y los colores que se
esconden detrás del cristal pueden surgir
en nosotros en este momento, como si
estuviéramos ahí gracias a la imaginación.
¿Cuántas personas habrán participado
en la creación de semejante obra de arte?
Y ¿cuántas más se habrán parado en
ese escenario?, tras la cortina y frente a
él, músicos, poetas, actores, escritores,
bailarines, escultores, cineastas, pintores…
Creadores y espectadores al mismo
tiempo.
Si imaginamos que estamos ahí, qué
artista sería al que iríamos a ver: The
Beatles, Pablo Neruda, Elisa Carrillo, Isaac
Hernández, el Ballet de Amalia Hernández,
Pablo Milanés, Pedro Infante.
Algunos dirían, Pedro Infante ya murió, pero
eso no importa, para la imaginación todo es
posible; en un ejercicio creativo, podemos
recrear lo que se nos ocurra, sin límite de
tiempo ni espacio. Tenemos la capacidad
de visualizar lo que queramos, liberarnos de
las ataduras de lo convencional para darnos
una cita con nuevas realidades. Podemos
imaginar. Sin límites.
Nos damos una cita con la vida. Veamos
el mundo con una nueva mirada.
Abramos la puerta al arte. Creemos
nuevos universos.
La luz del telón de Bellas Artes cede su
brillo a la oscuridad, como un hoyo negro
del que emergerán otras tonalidades y
culturas. Otras formas de vida.
Observemos el mundo.
alMa elIsa raMírez Cano
ely_zas@hotmail.com
El IMCE de septiembre se desaceleró a una tasa mensual de -3.78%, siendo la segunda caída más
fuerte en todo el año, por detrás de la baja de –11.08% al comienzo de 2022. De esta manera, el IMCE
retrocedió de 71.46 unidades observadas en agosto a 68.76 puntos. Lo anterior fue a causa de una
disminución mensual de -3.09% en la situación actual, la cual se situó en 64.84 puntos con -2.07
puntos menos respecto al mes anterior. La situación futura, que representa la confianza en los
próximos seis meses, declinó -4.53% hacia 73.65 puntos desde los 77.15 puntos de agosto.
En relación con septiembre de 2021, el IMCE, de igual forma, se enfrió, aunque en mayor medida, para
registrar una tasa anual de -5.81%, resultado de una reducción de -6.32% en la situación actual y de
-5.25% en la situación futura.
Las condiciones de inseguridad en el país fueron seleccionadas, por segunda ocasión consecutiva,
como el principal factor que limita el crecimiento de las empresas en México, seguido por la falta
de capital y la corrupción. Cabe señalar que la situación COVID 19 cayó al cuarto lugar por primera
vez desde que se desarrolló la pandemia.
Diseño, metodología y cálculo elaborados por la Comisión de Análisis Económico del IMCP, con datos de la membrecía de los
Colegios de Contadores Públicos Federados al Instituto, y aportantes externos de información.
Lic. ErnEsto o´FarriLL santoscoy
Presidente de Bursamétrica
Colaboración especial de la Lic. Sofía Santoscoy Pineda
Índice de septiembre
64
ARTES
65
IMCE

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