Administración de Tecnología/ Discusiones tecnológicas
| Autor | Enrique Canales |
Vamos a suponer que dentro de la empresa donde trabajamos ya tenemos unos procesos y algunos productos que están por encima de lo que piden las normas internacionales. Además supongamos que nuestros productos y servicios ya están por encima de lo que nos exigen los clientes, de lo que nos aconsejan algunos proveedores y nos indican las mejores prácticas internacionales.
Vamos a suponer también, que nuestros productos y servicios poseen además algunos atributos competitivos y nos hemos posicionado en la punta de la tecnología en dicho campo. Aviso; existen muchas empresas mexicanas que ya están en la punta tecnológica de su especialidad.
Llegar a esto se requiere que al menos algunas personas le dediquen unas 4 ó 6 horas por semana por dos o tres años de estudio, de concentración, de experimentación y de exageración.
Vamos a suponer que hacia el futuro competitivo que nos queda enfrente, vemos algunas veredas por donde podemos mejorar aún más nuestros productos; a) aumentando valor del producto b) bajando su costo. Es importante primero subir el valor y luego bajar el costo, en ese orden.
Conviene primero intentar subir el valor de lo que hacemos porque eso nos lleva a profundizar en nuestros conocimientos tecnológicos y científicos del tema de nuestra empresa. Ahora sí, desde el dominio del conocimiento, podemos realizar desarrollos tecnológicos sustanciales que suban el valor bajando tremendamente los costos.
Vamos a suponer que ya hemos repasado y analizado las patentes de los competidores y los últimos artículos científicos de algunas universidades. Así mismo tenemos varios modelos del comportamiento de las variables y hemos confirmado que estamos en el "cutting edge", el filo de la punta de la flecha en comparación con el grupo de competidores.
Si ya estamos en la frontera tecnológica ¿qué vemos?, ¿cómo es el límite del conocimiento?, ¿ves niebla? ¿ves negro? ¿ves luciérnagas en la oscuridad del bosque? ¿qué hay más allá de lo que sabemos ahorita? Aunque no lo crean, la frontera de la tecnología no son unas oficinas llenas de computadoras, no es tampoco como la cabina de control de un 747, ni un laboratorio a la NASA, nada de eso.
La frontera tecnológica tiene la misma cara que siempre ha tenido nuestra empresa, salvo que ahora algunas gentes traen gran entusiasmo y se nota un aumento de la discusión.
Todas las fronteras tecnológicas tienen rostro de...
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