Acoso a la privacidad digital

AutorErnesto Villanueva

Gracias a internet hoy se tiene acceso a una gran variedad de servicios que antes eran impensables: Hoy se pueden ver películas o programas televisivos con gran calidad de recepción técnica, hacer compras en línea y establecer comunicación entre personas sin costo alguno y sin importar dónde se encuentren.

Estas aplicaciones de internet que mejoran sus funciones día con día, y con nuevas opciones en tiempos récord, han generado que la red sea ahora parte de la vida diaria de un número cada vez más amplio de personas. Paradójicamente, el éxito de internet de abaratar costos en la comunicación, de encontrar fuentes de información de todo tipo de materias y, en suma, de hacer el mundo globalmente interconectado, hoy enfrenta una gran amenaza: la vida privada -que no sólo es un derecho humano, sino uno de los atractivos de prácticamente todas las principales aplicaciones de la red de redes- está en riesgo.

En Estados Unidos ha habido presiones de las autoridades para que empresas de mensajería digital abran sus archivos para conocer los contenidos de lo que se dice y se escribe. La mayor parte de las empresas se han negado a esas solicitudes de apoyo por dos razones: a) por el convenio de privacidad que suscriben con sus usuarios; y b) por la pérdida de usuarios que ven en la seguridad de las comunicaciones una herramienta para proteger su derecho a la vida privada.

La semana pasada, por ejemplo, el app o aplicación WhatsApp fue condenada a dejar de funcionar, por orden judicial, por negarse a revelar contenidos de sus suscriptores. Y es que precisamente por las fugas de información WhatsApp ha creado el servicio de cifrado o encriptación de extremo a extremo, con el objeto de hacer más seguras las comunicaciones de sus usuarios.

En efecto, de acuerdo con la página oficial de esa empresa, "el cifrado de extremo a extremo de WhatsApp asegura que solo tú y el receptor puedan leer lo que es enviado, y que nadie; ni siquiera WhatsApp lo pueda hacer. Esto es porque tus mensajes están seguros con un candado y solo tú y el receptor tienen el código/llave para abrirlo y leer los mensajes. Para mayor protección, cada mensaje que envías tienen su propio candado y código único". (https://www.whatsapp.com/security/).

La orden de suspensión fue revocada por el tribunal de apelación como resultado de los recursos interpuestos por el equipo jurídico de WhatsApp, de suerte que dos días después fue restablecido el servicio.

En México, también hace apenas unos...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR