¿A dónde van los menores infractores?
| Autor | Gloria Domínguez |
Para los adolescentes que han cometido cierto delito o falta, las autoridades estatales tienen dos centros de readaptación social en donde los menores pueden recibir un tratamiento que va de acuerdo a la infracción cometida.
En estos centros tutelares, que sólo son dos en todo el estado, los menores son clasificados de acuerdo al delito que hayan cometido y reciben la rehabilitación que se considera adecuada, en la que el objetivo primordial es que el adolescente no reincida.
El sistema penitenciario para menores cambió en los últimos 20 años, ya que en 1981 sólo existía un centro que se conocía como la Granja Juvenil de Recuperación y pertenecía al DIF Jalisco.
Alejandro Corneo Ramos, director de Prevención Social y Normas Técnicas de la Digpres indicó que la granja estaba destinada para cubrir sólo el diagnóstico personal y de disfunción personal de los niños y adolescentes infractores, sin proporcionarles un tratamiento específico.
"A principios de 1982 se inicia la construcción del lo que hoy se conoce como el Centro de Observación para Menores Infractores, en la Colonia Miramar, y fue entregado en junio de ese mismo año.
"Este centro surge como un centro de diagnóstico y se le denominaba Unidad de Diagnóstico Social y con la reforma de 1983 con el entonces Gobernador del Estado, Flavio Romero de Velasco, cambian a depender de lo que hoy conocemos como Digpres (Dirección General de Prevención y Readaptación Social)".
Cornejo Ramos agregó que el Centro Tutelar, como también se le conoce, surgió ya como un área técnica de alto nivel especializada para la observación, clasificación y diagnóstico de jóvenes con conductas antisociales.
Después de seis años de trabajar sólo con el Tutelar, en 1989 se inicia la construcción de la Granja Juvenil de Readaptación Social, ubicada en la Colonia Las Liebres, en El Salto, misma que fue entregada a las autoridades de Digpres por el entonces Presidente de la República, Miguel de la Madrid Hurtado.
Desde entonces el trabajo de los dos centros se dividió, mencionó Cornejo Ramos, ya que el Tutelar sólo se ha dedicado, hasta la fecha, a la clasificación y diagnóstico de los menores y en la Granja a la reclusión de los infractores que requieren mayor atención.
"La diferencia es que el Tutelar es el centro técnico de observación, en donde también se atiende a jóvenes primoinfractores, niños de 12 y 13 años que entran por primera ocasión en conflicto con la Ley", señaló Cornejo Ramos, "y de lo que se trata es...
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