¿Reforzados?

AutorIsmael López y Alberto Sandoval

Aunque la esperanza y el objetivo de ambos equipos regiomontanos y sus aficiones vuelven a ser los mismos de los últimos años, de meterse a la Liguilla por el título, la realidad es que como lucen, ni Rayados ni Tigres ofrecen garantía de éxito en este Torneo de Verano 2001.

Y es que a unas horas de que arranque la nueva campaña, los refuerzos de categoría que vendrían a apuntalar y fortalecer a ambas escuadras, y que podrían alimentar la esperanza de clasificación a una afición que tiene cuatro años y medio sin Liguilla, no han llegado y no llegarán.

Los felinos no se reforzaron, sólo completaron su plantel con las adquisiciones de Valtencir Gomes, un volante brasileño de 31 años, que desde 1996 tenían relegado en su filial de la Primera A, y Eduardo Lillingston, un delantero que en su anterior equipo, Toluca, no fue titular y jugó poco.

Pero los Rayados ni eso. La directiva fue un caos, incluso su presidente, Ricardo Garza, anda de vacaciones desde antes de Navidad, y no logró ninguna contratación, porque los refuerzos intentó adquirirlos en préstamos y, obvio, en esas condiciones no consiguió nada.

Ante esa situación, ayer se abrió la posibilidad de que el español Francisco Javier Aguilera regrese al equipo, cuando la directiva lo había despedido, e incluso aseguraba que ya lo había vendido al Dundee United, de Escocia. En el torneo pasado casi no jugó y no anotó goles.

Monterrey en la pretemporada volvió a mostrar un futbol vertical, que gusta, pero le sigue faltando contundencia al frente y solidez atrás. Además, su plantel es limitado y cuenta con pocos elementos de peso que saquen a flote al equipo cuando vengan las lesiones, suspensiones y bajas de juego.

En el Invierno 2000 logró 20 puntos, y ahora la meta será hacer por lo menos entre 5 y 10 más que les abra la posibilidad de clasificar, y por ende de eludir el fantasma del descenso, pues aunque le saquen una buena ventaja a Atlante y León, una mala racha como la que cayó el torneo pasado provocará que se vea en serio peligro con este problema.

Así que, de los dos...

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