De vuelta al origen
| Autor | Jorge Alberto García |
Si los humanos tienen la dieta paleolítica, los perros y gatos pueden presumir de la dieta BARF. Ésta está basada en comida cruda que asegura ofrecer una alimentación balanceada para las mascotas.
En Monterrey, marcas como Barf Monterrey y Wuffraw ofrecen alimentos basados en los principios de esta dieta cuya base principal son vísceras de res y pollo, sin haber sido sometidas a cocción, y frutas, verduras y granos.
Las siglas BARF se refieren a la frase en inglés Biologically Appropriate Raw Food, que en español sería Alimentos Crudos Biológicamente Apropiados. Médicos y nutriólogos caninos han elaborado dietas basados en esta idea.
Marisa Covarrubias, propietaria de la planta Barf Monterrey, menciona que el alimento que venden es sólo para canes y éste trata de emular la naturaleza, dándole a su cuerpo lo que está diseñado para digerir.
"Es regresarle lo que el hombre le quitó por comodidad, es decir, la carne. Aunque el perro es omnívoro, la mayor cantidad de nutrientes que requiere proviene de la carne cruda", señala.
"Nuestro producto combina carne y vísceras de res, carne y huesos de pollo, y vegetales, como zanahoria, calabaza y chayote. Todo se muele y mezcla en porcentajes adecuados para el aprovechamiento óptimo del perro.
Por su parte, Arturo Perales, socio de Wuffraw, comenta que la dieta para perros y gatos que proponen posee el equilibrio necesario de vitaminas, minerales, grasas, proteínas y fibra, para un funcionamiento apto de su organismo.
"Se prepara con carne fresca, puede ser de res o pollo, e incluye corazón, hígado, hueso, frutas, verduras y semillas como chia y linaza. No tiene maíz, arroz, trigo, soya, gluten, conservadores, colorantes o saborizantes", dice.
Perales afirma que los alimentos secos y húmedos que se empezaron a comercializar en los años 50 son prácticos para las personas, pero sus ingredientes perjudican a largo plazo la salud del animal.
"Un ejemplo son las croquetas preparadas con harinas principalmente, que luego son adicionadas con productos de origen animal, como patas, picos y plumas, elementos que la industria de alimentos desecha", remarca.
"Esto se refleja en un desmejoramiento en la salud de la mascota a largo plazo por la cantidad de carbohidratos que contienen: al contrario de los humanos, la fuente principal de energía de las mascotas son las grasas".
El propietario agrega que el alimento está contraindicado para mascotas con insuficiencia renal, entre otros problemas de salud, ya que...
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