Vivir con valor / Corrupción y Vanidad

AutorMarcos Ortiz Cué

Es de todos conocido que la corrupción es una de las situaciones que con más frecuencia se presentan y que más daño nos hace. La corrupción es la perversión de algo. Es cuando algo se descompone, se altera, se vuelve peor.

También sabemos que la corrupción se presenta porque a alguien le conviene pervertir el orden de la ley o de la moral. Al hacerlo se obtiene una ganancia, generalmente de tipo económico. Si bien esta es una de las formas con las que más frecuencia se presenta la corrupción, no es la única y a veces, no es la peor.

Hace unas semanas murió Lolo Ferrari, una francesa que utilizaba este nombre artístico. Esta mujer era famosa por tener el pecho más grande del mundo, tanto así que obtuvo un récord Guiness.

Su exuberante busto no era natural. Su último implante fue diseñado por un ingeniero aeronáutico con la complicidad del esposo de Lolo Ferrari. Cada implante podía contener casi el equivalente a un galón de líquido. La pobre Lolo no podía dormir boca abajo por razones obvias (intente dormir sobre dos recipientes que puedan contener un galón). Tampoco podía dormir boca arriba, ya que el peso de su aerodinámico busto dificultaba la respiración. Para desgracia de muchísimos fotógrafos y revistas, Lolo decidió suicidarse siendo todavía joven.

¿Qué llevó a esta pobre mujer a estos extremos? Su inseguridad. Desde niña su madre se encargó de decirle lo fea y tonta que era. El ambiente escolar tampoco le ofreció posibilidades de reconocimiento, el mundo de las artistas, modelos y del glamour se convirtieron en obsesión.

Creo que...

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