Vive el mundo de los pequeños creativos

AutorYoana Rodríguez

En los mundos de los niños las princesas viven en casas de campaña, el cielo se colorea en amarillo y verde, los árboles tienen raíces para caminar y la toalla del baño posee el superpoder de volar.

Son capaces de crear universos que desafían todas las regularidades del mundo adulto y se llenan de fantasía.

De acuerdo a la teoría del desarrollo cognitivo, del biólogo francés Jean Piaget, la etapa preoperacional en los niños abarca de los dos a los siete años. En ella adquieren el juego simbólico, donde los objetos comunes los convierten en otros extraordinarios y simulan situaciones como ir de compras, hacer de mamá y papá, visitar al doctor, alimentar a sus muñecos o ser el héroe en su propio juego.

"Es la etapa del pensamiento mágico. Viven ese momento en el que son capaces de construir sus mundos y pensar en cosas que a los adultos parecen locas e inusuales", comenta Karen Gastellum, educadora especializada en el área de educación para el ocio y la recreación.

Gastellum es directora del Centro Educativo Happy Mind, en él trabaja con niños de tres a 12 años mediante el juego como herramienta principal del aprendizaje.

"El juego te permite ver al niño tal cual es. Cuando se divierten aprenden más fácil mientras trabajan su parte motora y desarrollan su carácter a través de sus gustos y motivaciones", explica la educadora.

Tanto en casa como en los salones de preescolar la tarea de padres y educadores es fomentar esa enorme imaginación por medio de estímulos que la desarrollen en actividades lúdicas y educativas.

Una salida a un museo es la oportunidad perfecta de exponerlos a nuevos conocimientos, acercarlos a otros mundos y realidades y despertar su sensibilidad artística...

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