VISIÓN ECONÓMICA / Sorprendentes cifras del Inegi
| Autor | Salvador Kalifa |
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) publica muchas de las estadísticas oficiales en el País. Calcula y da a conocer al público la variación quincenal, mensual y anual de los precios, tarea que por muchos años realizó el Banco de México. También hace las encuestas para estimar la tasa de desocupación y otras variables relacionadas con el empleo.
Es la institución que nos dice, además, cuál fue la evolución de la economía en un mes, trimestre y año, así como proporciona los indicadores de la producción industrial, las ventas comerciales y otros datos sobre la actividad económica.
En este sentido, cabría esperar que, en general, la información del Inegi reflejara de manera realista y creíble el comportamiento de la economía mexicana. Sin embargo, son cada vez más los datos proporcionados por la institución que muestran un País muy diferente al que perciben los ciudadanos.
La inflación anual al consumidor en México durante el 2015 y lo que va del 2016, por ejemplo, es apenas poco más de un punto y medio porcentual que la registrada en Estados Unidos (EU), a pesar de las grandes diferencias en el movimiento de las divisas de ambos países en ese periodo.
Mientras que el peso se ha depreciado considerablemente frente al dólar, esta divisa se fortalece en relación con el resto de las monedas, salvo el yen japonés. La caída del peso es, por mucho, superior a la apreciación del dólar, por lo que se esperaría que el efecto sobre los precios fuera también en sentido contrario entre ambos países. En EU la apreciación del dólar aminora las presiones inflacionarias, mientras que la depreciación del peso, en principio, las alimenta.
Entre octubre del 2014 y septiembre del 2016 nuestra moneda se depreció 43.9 por ciento frente al dólar, mientras que este se apreció en 10.6 por ciento respecto a las monedas de sus principales socios comerciales. En ese lapso la inflación al consumidor en México se redujo en 1.33 puntos porcentuales (pp), de 4.30 a 2.97 por ciento, y en EU la inflación también disminuyó, como era de esperarse, pero solo en 0.3 pp, de 1.66 a 1.32 por ciento.
Lo sorprendente de esos datos es que a pesar de que en México las importaciones representaron en el 2015, 41.2 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) y los precios de prácticamente todas se cotizan en dólares, los cálculos del Inegi no registran un traslado de la depreciación a los precios al consumidor.
Las anécdotas que difieren de la...
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