Viaje de placeres

AutorHomero Fernández

MURAL /Enviado

Cuando vaya a Uruguay aproveche para comer mucho, porque la mayoría de los alimentos derivados de la carne y la leche, aunque exquisitos, no los podrá traer consigo, a poco que quiera correr el riesgo de que se lo quiten en la aduana mexicana.

Entonces éntrele a la carne a la parrilla con los tradicionales cortes del bife de chorizo, el asado de tira, la entraña (arrachera con grasa) y a los embutidos como chorizos, morcillas y chotos (especie de machito). Claro que si no quiere pensar demasiado y sólo saborear no tenga pereza de entrarle a las menudencias de la vaca (riñones, hígado, tripas, ubre...). Asadas al calor de las brasas de la leña son exquisitas, aunque el colesterol pueda iniciar una loca carrera.

La carne en Uruguay suele ser un poco menos blanda que los cortes que se ofrecen en los restaurantes llamados argentinos en México. Eso debido a que el ganado se alimenta naturalmente, no consume hormonas, y camina para comer lo que lo hace más duro en sus músculos.

¡Ah! No deje de probar los hotdogs (llamados popularmente "panchos") y la pizza a la leña acompañada de fainá (masa de harina de garbanzo).

El regalo ideal

- Artículos de piel: en Uruguay suelen ser baratos y de muy buena calidad. Hay desde zapatos, bolsos y cinturones, hasta chaquetas para hombres y mujeres.

- Artesanías de piedras: Aquí...

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