Velocidad frena la vida a 14 personas en 2 años
| Autor | Héctor Castro |
Aplicar con desmedida el acelerador ha frenado la vida de 7 conductores y 7 víctimas en el 2001 y lo que va del 2002, en calles del área metropolitana.
De acuerdo a los partes informativos de las autoridades viales, la velocidad a la que ocurrieron estos impactos fue de entre 120 y 180 kilómetros por hora.
Uno de los casos en los que el conductor ha retado a la velocidad ocurrió precisamente el miércoles pasado.
José Juan Treviño Cantú, de 19 años, conducía su auto Sentra a más de 140 kilómetros por hora por la Avenida Alfonso Reyes; de acompañante, llevaba a su amigo Jorge Antonio Hernández Chapa, de 17.
Al llegar al cruce de Lázaro Cárdenas, Treviño Cantú perdió el control del auto y se estrelló contra un poste de la CFE, posteriormente contra una intersección vial, luego contra una banqueta y una base metálica, para luego terminar volcado en el centro de una fuente.
Por la velocidad a la que circulaban, el auto quedó despedazado en 13 partes, mientras que ellos salieron disparados del Sentra, logrando sobrevivir al estrellamiento ante la mirada atónita de los socorristas que no daban crédito a lo que estaban viendo.
Horas después, Hernández Chapa murió, mientras que el conductor, presunto responsable del accidente, se encuentra hospitalizado.
Según el Reglamento de Tránsito de Monterrey, la velocidad máxima permitida en zona urbana es de 50 kilómetros por hora, mientras que en escuelas y parques es de 30.
En la Avenida Constitución, la velocidad máxima que está marcada es de 80 kilómetros en el carril de alta velocidad.
Sin embargo, aunque los límites de velocidad estén reglamentados, los conductores hacen caso omiso de ellos y retan a la muerte.
Como un ejemplo de estos casos, en los 14 accidentes que han sido ocasionados por el exceso de velocidad en estos dos años, siete conductores han alcanzado la meta final: la muerte.
De manera instantánea, el 29 de septiembre, dos jóvenes que viajaban en un auto a más de 120 kilómetros por hora, murieron al estrellarse contra un puente peatonal, en San Nicolás.
Aunque en un principio se creyó que la principal causa por la que estos jóvenes habían chocado era por el alcohol, los peritos lo descartaron, nuevamente el exceso de velocidad cobraba dos vidas.
Como estos casos, también hay quienes todavía pueden contar su hazaña de haber vencido a la muerte.
El 11 de agosto de este año, Fernando Medrano Flores, de 30 años, al circular a una velocidad de 180 kilómetros por hora en su auto de lujo y...
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