Une Cué en Oaxaca los colores de la oposición
| Autor | Luis Enrique Pacheco |
REFORMA / Enviado
OAXACA.- No dejó de sonreír Gabino Cué en las postrimerías de La Fuente de las 7 Regiones, de donde partió la marcha con la que arrancó su campaña por la Gubernatura.
"¡Estoy feliz!", exclamó en corto, contemplando el colorido gentío compuesto por perredistas encamisados de amarillo, panistas inflando globos blancos y convergentes engorrados de naranja.
"¿Más vigilancia? No. Yo no tengo nada que temer. El apoyo de la gente me resguarda, eso es lo que importa. De aquí hay que jalar para adelante, sin temores, sorteando las complicaciones.
"Quiero ser Gobernador y vamos a seguir trabajando por eso... se puede imaginar un Oaxaca distinto, menos autoritario, si la gente así lo decide", dijo el candidato de la alianza opositora.
Eran las 17:00 horas en la Avenida Porfirio Díaz, ubicada al norte de la capital oaxaqueña, cuando el heterogéneo grupo avanzó. El calor menguaba, se afianzaba la sombra y, uno detrás de otro, tronaban los cohetones.
A la par, campesinos de Putla, Ocotlán, Santa María Coyotepec, Etla de Juárez y San Pedro el Alto, entre otras comunidades, buscaban acomodo entre el movedizo contingente. Y a gritos aclaraban: "¡Atrás, adelante, a los lados, aquí no hay acarreados!".
En el río de simpatizantes -8 mil, según la Policía de Tránsito-, predominaban niños descalzos, ancianos vistiendo raídos sombreros, o mujeres arrastrando gastados guaraches y con el chilpayate sujetado a la espalda por un rebozo.
Estaban también las matracas, los silbatos, las palmas, las mantas: "No a la mentira, sí a la verdad", se leía en una. "Azul, amarillo y naranja, con Gabino, Oaxaca tiene esperanza", rezaba otra.
No faltaron las estruendosas bandas musicales animando el festivo entorno con el ¡pum-pum! del tambor, y el ¡trash-trash! de los platillos y el ¡zas-zas! de la trompeta.
Cué, con camisa de mezclilla, pantalón beige y botines negros, no cabía de gusto. Risueño, asentía, saludaba y respondía con el puño en alto a las arengas que volaban a su espalda -"¡Ya llegó, ya está aquí el que va a sacar al PRI!".
Tomando de la mano a Mané Sánchez, su esposa, Cué caminaba con Leonel Godoy -¿azarosamente?- a su izquierda, y Dante Delgado y Luis Felipe Bravo Mena -¿casualidad?- a su derecha.
Atrasito, más serio, venía el ex Canciller Jorge Castañeda: "Vengo a respaldar a Gabino. Estaré viniendo durante la campaña lo más que pueda. Nos conocemos desde hace tiempo. Le tengo un gran aprecio".
Luego los marchistas entraron a la empinada calle...
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