Ultraligera y versátil

AutorEmmanuel León Vázquez

El año 1989 marcó el fin de una era. El Muro de Berlín cayó y la URSS inició un proceso de desintegración. El periodo conocido como la Guerra Fría, que dividió al mundo en dos bandos tras la Segunda Guerra Mundial, uno estadounidense y otro soviético, había terminado. Justo en 1989, nace Asus, fabricante de hardware de informática y electrónica de consumo, en Taipéi, Taiwán, año que marcó el inicio de otra época: la democratización de la informática.

Para entonces, el país asiático, que tuvo una vigorosa industrialización con enfoque en la electrónica, era parte de los Cuatro Tigres o Dragones de Oriente, grupo al que también pertenecen Corea del Sur, Hong Kong y Singapur, países caracterizados su liderazgo en tecnología, que cada vez más llenaban los hogares de productos electrónicos.

A 34 años de historia, Asus, fiel a su ADN innovador y firme ante las adversidades que caracteriza a las empresas orientales, sigue poniendo en alto a Asia como la meca de la electrónica. Este año lanzó para el mercado mexicano una laptop versátil del tipo ultra delgado, nos referimos a la Asus Zenbook S 13 OLED.

El modelo que llegó a nuestra redacción era un color gris mate en la cubierta, con gris brillante en su interior. Unas figuras tipo romboide se extienden a lo ancho de la tapa hecha de aluminio de cerámica de plasma, un componente robusto en resistencia, pero suave al tacto.

Su pantalla es de 13.3 pulgadas, pero me pareció suficiente. Me sorprendió su grosor de 1 cm y peso de 1 Kg, muy conveniente para el traslado en la mochila, apenas notas que la llevas. La unidad que reseñamos llevaba el teclado de Estados Unidos, sin embargo, las versiones para México tienen la composición con la tecla Ñ.

Durante su estancia en Gadgets, este equipo fue sometido a las jornadas extenuantes de un reportero y logró calificaciones aprobatorias en más de un área. La primordial, la escritura, pasó con un 10. El teclado se levanta unos 20 grados al abrir la portátil, así que no castiga tus manos al redactar. Pasé literal todo el día escribiendo en ella y no me quejé.

Fue como pan con mantequilla en los procesos. Mantuve operando al mismo tiempo distintos programas como Spotify, el explorador de archivos, Paint y en el navegador Microsoft Edge abrí múltiples pestañas para buscar imágenes, artículos informativos o videos para hallar información y su desempeño estuvo a la altura.

Claro que no le fue bien en todo. Mientras llevé a cabo estas tareas pesadas o incluso al...

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