Turista de buen diente
| Autor | Alejandro Dungla |
Dicen que viajar es lo único que compras y te hace más rico. Antes de pensar en lanzarte a los destinos internacionales de moda, debes conocer tres pilares de la cocina mexicana, sentarte en sus mesas, husmear en sus milpas y cosechar en sus huertos. Oaxaca, Mérida y Ensenada prometen hacerte millonario en experiencias y aprendizajes.
MÉRIDA
Después de este viaje tu Instagram estará lleno de imágenes de calles tranquilas con aire mediterráneo y arquitectura señorial.
La capital de la tierra del venado y el faisán guarda tesoros de una tradición culinaria que resultó de la fusión de la cocina maya con la de España y el Medio Oriente. Yucatán sabe a pepitas de calabaza, achiote, naranja agria y chile habanero.
Aviéntate el "road trip" ida y vuelta hasta Puerto Progreso, es sólo media hora de carretera y el recorrido vale la pena.
Al llegar ahí te darás cuenta de que no hay nada como disfrutar los pescados y mariscos más frescos, preparados con la sazón y las recetas locales. Pídete un pan de cazón o un pescado relleno de mariscos y, para el desempance, échate un paseo por el malecón.
NO TE PIERDAS
+ Panuchos de camarón en el mercado García Rejón
+ Sopa de lima en Chaya Maya, Calle 62 No. 481, Centro
+ Cochinita pibil en el mercado Lucas de Gálvez
+ Marquesitas en la Plaza de la Independencia
COMER Y DORMIR EN
NÉCTAR
Av. Andrés García Lavin 32, San Antonio Cucul, (999) 938-0838. Uno de los locales más creativos de la Península.
SANTA LUCÍA HOSTAL
Calle 55 No. 512, Centro, (999) 928-9070 Desde $216 por noche
OAXACA
Es de esas ciudades que no te vas a acabar en una sola visita. Para que te des una idea: es la capital del estado con mayor diversidad étnica y lingüística en México.
Cada uno de sus rincones coloniales está lleno de historia y tradición, de aromas y sabores que dan cuenta de una herencia gastronómica con profundas raíces indígenas.
Impensable partir sin una "selfie" con uno de sus robustos edificios de cantera verde de fondo. Y difícilmente podrás resistir la tentación de colarte en alguna fiesta tradicional o enrolarte en actividades culturales.
Ah, y olvida la dieta, porque su cocina rebosa especialidades locales que pueden disfrutarse a súper precio en puestos, fondas, mercados, mezcalerías y restaurantes.
Festivales como El Saber del Sabor, la Feria del Mezcal y la Guelaguetza bien valen la vuelta.
NO TE PIERDAS
+ Tejate en la Plaza de Santo Domingo.
+ Tlayudas en la calle de Libres 206, entre Morelos y Murguía.
+ Tasajo...
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