Tonatiuh Bravo Padilla / Gobierno Estatal-UdeG

AutorTonatiuh Bravo Padilla

A final de cuentas, el conflicto presupuestal del Gobierno estatal con la Universidad de Guadalajara, no necesariamente dejó malas experiencias. En resumidas cuentas, se trató de una segunda gran medición de fuerzas y espacios sociales, entre el tercer Gobernador de extracción panista en la entidad y la directiva universitaria.

Antes, con los gobiernos priistas, también había habido manifestaciones universitarias dirigidas a la obtención de una mayor asignación presupuestal, pero ciertamente, tuvieron características diferentes. Durante el primer gobierno de cuño panista, encabezado por Alberto Cárdenas, las principales diferencias fueron por la designación de los directores del Hospital Civil de Guadalajara primero, y después por el tema presupuestal. Culminaron en el periodo previo a la toma de posesión de Francisco Ramírez Acuña, con la aprobación de un decreto sui generis, en el que se otorgó un incremento presupuestal a la UdeG programado para los seis años siguientes, entre 2001 y 2006.

Con el nuevo gobierno encabezado por Emilio González Márquez, se acabó la política presupuestal que le dio estabilidad a la relación. Adicionalmente, incubó un problema: el incremento al subsidio ordinario estatal nunca fue negociado para que hubiese una contraparte lógica de parte del Gobierno federal. Esta fue una omisión del propio Gobierno del Estado, en términos de las relaciones de coordinación fiscal.

La diferencia se hizo conflicto cuando las autoridades de la Universidad de Guadalajara se percataron de que esperar una reacción de parte del Gobernador, por vía de la pura negociación, sería imposible. Una y otra vez, en mesas de diálogo o en pláticas directas, siempre operaron en favor del Gobierno, ganando tiempo y evadiendo cualquier propuesta concreta de solución.

El conflicto se caracterizó por ser el más prolongado. Podemos distinguir tres momentos. El primero, desde que la UdeG concretó su demanda de exigir las contrapartes de los fondos extraordinarios federales acumuladas desde 2007, 2008, 2009 y 2010 por 701 millones de pesos...

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