Tolvanera / El espejo y el armario

AutorRoberto Zamarripa

Dos objetos son preciados por Enrique Peña Nieto: el espejo y el armario. El obsesivo cuidado de su imagen no es un mero asunto de vanidad. Es parte, como se sabe, de una millonaria estrategia mediática que quiere posicionar al actual Gobernador del Estado de México como un "estadista exitoso".

En su primer año de gobierno, Peña proyectó gastar más de 700 millones de pesos en spots y "notas informativas" de televisión, es decir notas pagadas disfrazadas de cobertura noticiosa.

Por eso Peña se mira tanto en el espejo. Y por eso nunca sale despeinado. Porque uno de los propósitos declarados por sus estrategas mediáticos es consolidar la simpatía femenina, no tanto porque el Gobernador aplique políticas de género sino por el peso que en el padrón electoral tienen las mujeres.

Si realmente Peña se preocupara por ellas, habría hecho algo significativo por detener la ola de feminicidios que existe en la entidad. En el 2007, según datos del Observatorio Ciudadano del Feminicidio, revelados hace algunos días, de los 447 crímenes contra mujeres ocurridos en 15 entidades del País, 73 han sido en el Estado de México.

Peña no tiene spots sobre la violencia contra las mujeres ni tampoco ha videograbado nada en las zonas inundadas del estado de México. Las inundaciones graves que se advertían para el Distrito Federal ocurrieron la semana pasada en territorio mexiquense. Ecatepec, Tlalnepantla, Atizapán y otros municipios resintieron el efecto de las lluvias y de los retrasos en obras hidráulicas donde el gobierno de Peña tiene una grave responsabilidad.

En 1997 fue constituido el fideicomiso 1928 donde los gobiernos del Distrito Federal y del Estado de México junto con las autoridades federales se comprometían a financiar obras de infraestructura y saneamiento de la Cuenca del Valle de México. Según el diputado local panista Alfredo Vinalay, el gobierno de Peña adeuda 12 mil millones de pesos a ese fideicomiso.

Si ésa es la preocupación que tiene Peña por las obras hidráulicas difícilmente cumplirá con la cercanía que pregona en los municipios afectados por inundaciones.

Y si en una zona se anegan en otra viven bajo el temor. En Metepec ha ocurrido en el último mes una decena de secuestros con un móvil similar: secuestros rápidos cometidos al parecer por un mismo grupo delictivo.

Esa modalidad de secuestro es muy parecida a la que se impuso en Tijuana hace algunos años cuando se involucró a policías municipales y operadores del narco en esas actividades...

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