De todo corazón consejos humanos
Otro aventado
Hola, me gustaría que aceptes salir conmigo. Soy Carlos Martínez, tengo 30 años, soltero.
Carlos Martínez, 30 años.
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¡Hooola!, querido Carlos. Gracias por la invitación. Mándame tu foto al correo tiaremedios@reforma.com y ya veremos, contigo ya tengo tres candidatos.
Desperdicia oxígeno
Querida tía Remedios, a veces me siento muy mal, siempre estoy de mal humor y no quiero comer nada. Hace poco leí el caso de una chica a la que podrían permitirle morir con la ayuda de especialistas en Europa.
A mí dejó de gustarme la vida desde hace mucho, sé que esa chica tiene varios problemas psicológicos y que yo estoy sano, pero muchas veces pienso que no quiero vivir aquí. No me suicido porque sé que alguien tendría que cargar con mi cadáver y no tengo dinero para dejar para un féretro.
¿Sabes si aquí se puede hacer algo parecido?, ¿o mejor me aviento a las vías del tren o algo así?
Ayúdame, tía, no quiero ser ya un desperdicio de oxígeno.
Samuel, 25 años.
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Querido Samuel, comprendo tu sensación de vacío y de no pertenecer a ningún sitio o grupo de gente, pero ¿qué culpa tienen de tu desesperanza los usuarios del tren? Si te lanzas a las vías vas a echarle a perder el día a todos aquellos que anden en la línea en la que decidas tirarte (y no es albur). En México no se puede ir a pedir que te "maten", oficialmente, como en Europa, y pues hasta hoy no has sido víctima de la delincuencia (que podría matarte). Así que tal vez te toque estar vivo. ¿Se te ha ocurrido pensar que puedes ayudar a otros? Tal vez tu vida no te sirva, pero tal vez podría serle útil a otros. ¡Podrías aplicar tu energía a hacerle más sencilla la vida a otros! Podrías ir a colaborar en un asilo de ancianos o en un albergue para niños. Siempre hacen falta manos que ayuden. Eso tal vez serviría para darle sentido a tu vida. También podría servirte buscar ayuda psicológica, aunque dices que no tienes dinero para pagar tu féretro, hay sitios donde la asesoría es muy accesible. Espero que te des cuenta que el haberme llamado es un signo de que estás buscando ayuda... y no para matarte.
Paradas continuas
Me encanta tener sexo cada que puedo, como soy microbusero, cada que se presta la ocasión, pues me echo uno que otro rapidín con las vendedoras de dulces o con las checadoras. Últimamente me he dado cuenta que cada que se sube una chava nalgona o chichona a mi unidad, pues se me para el animalón, jajajaja, y no es que sea presumido...
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