Tírele a lo seguro

AutorLeticia Ríos

Más vale prevenir que lamentar, dicta un sabio dicho popular, y es que los imprevistos pueden ocurrir no sólo en cualquier momento, también en cualquier lugar, provocando pérdidas irreparables, incluso en la propia casa.

Situaciones como un incendio, temblor, inundación o robo, pueden parecer lejanas, pero suceden en el momento menos esperado, dejando a los propietarios sin ninguna protección, a menos que cuenten con un seguro.

En México, asegurar la casa o departamento es poco común, se cree que se requiere una inversión alta, aunque con 6 mil pesos anuales, por ejemplo, se puede proteger un patrimonio valuado en 3 millones de pesos.

Alberto Villagrán, director de Seguros de Daños de la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS) refirió que esta cifra está muy lejos de competir con países desarrollados, donde casi el 100 por ciento de las casas cuentan con algún tipo de seguro.

"Cuando se registra una pequeña pérdida, como la ruptura de un cristal no hay ningún problema. Pero cuando ocurre un incidente mayor e inesperado, como un incendio, terremoto o erupción, las familias se quedan prácticamente en la calle, lo que resulta lamentable por no haber previsto un seguro", indicó Villagrán.

Con el terremoto de 1985, que destruyó importantes zonas de la Ciudad de México, se evidenció la situación, generando un incremento en la demanda de los seguros para casas, pero con el paso del tiempo la desgracia se fue olvidando y con ella el interés por buscar protección.

"Las casas no estaban aseguradas y tampoco muchas dependencias públicas. En aquel momento sí se notó cierto incremento en la demanda, pero al pasar los años se fue dejando. Los mexicanos tenemos una memoria muy flaca", indicó.

El representante de AMIS indicó que además de la falta de cultura de prevención del riesgo, existe el factor económico, el cual impide a un importante sector de los mexicanos contratar un seguro.

"De acuerdo con las últimas estadísticas existen en el país 40 millones de personas pobres, que viven con 20 dólares mensuales. Son ingresos bajísimos que apenas alcanzan para sobrevivir, difícilmente alguien que gane eso puede pensar en un seguro", comentó.

Villagrán destacó que la mayoría de los seguros para vivienda son contratados por personas que tienen un elevado poder adquisitivo, como aquellas que viven en grandes residencias o por empresas como hoteles.

Gabriel González, subdirector de Daños de la oficina México de ABA Seguros, explicó que en los...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR