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Testimodus Operandi / 'Las calientes'

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Vincent
AutorEdmundo Dantón

Esta "chambita" es de lo más irregular, ya lo vas a ir sintiendo y poco a poco aceptando. La mejor recomendación que yo te doy es que seas incondicional, disciplinado y efectivo, siempre listo para partirle la madre a cualquiera, como perro bravo, pero con dueño, y no un perro de rabia que hasta a los de casa muerde; esos, o los matan los contrarios, o los elimina su jefe porque traen más problemas que soluciones.

Sí se gana lana, no el sueldo que te pagan, eso vale madre, sino por los asuntos que se te van apareciendo y que tú puedes manejar acá, a la sorda.

Por ejemplo, el otro día cayó una denuncia de hechos en la que se detalló la muerte de un lactante, seis meses de edad, que se ahorcó cuando su bambineto se volteó de la cama y se quedó atorado contra la pared, ahogándose con el cinturón de seguridad que su mamá le ajustó. La "ñora" andaba quién sabe dónde, y el chiquillo ni llorar pudo, murió ahogado por la posición.

Esto, que para otros es un hecho lamentable, pero de mero trámite, para quienes tenemos experiencia resulta una oportunidad de ganarnos una lana. Me le apersoné a la familia y a través de un pariente cercano le dije que estaba comisionado en la investigación del deceso para determinar la categoría del homicidio, si culposo o doloso.

Ya sabrás cómo se pusieron. Ahí me mostré comprensivo y hasta afectado, siempre quejándome de lo ingrato de mi "chamba" por tener que intervenir como ahora en momentos de drama familiar, pero justificando mi labor: "alguien lo tiene que hacer".

Para no hacértela larga, terminé asesorándolos, haciendo los trámites pendientes y me vine quedando como con 15 mil pesitos después del "moche" con todas las instancias con las que hay que ponerse "la de Puebla".

Esos asuntos hasta da gusto hacerlos, pero hay otros, hijo, que de plano son de "güeva". Como ir a sacar a un "señalado" de su casa, sin orden ni nada. Andarlo cazando en su barrio o en sus "andaderos" para treparlo a "jodazos", como si lo estuvieras secuestrando y enfrentarte a familiares y amigos y sin saber si van a sacar armas. Ahí sí te la tienes que rifar a todo pulmón, como dice la canción.

Pero lo peor viene cuando le dices a tu jefe "ahí traigo al indiciado", y él te dice "que te...

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