El terror de la colonia

AutorGabriel Tamayo

Un grupo de vecinos de Villa Universitaria, una colonia de clase alta de la Zona Metropolitana de Guadalajara, señaló ante las autoridades al jugador de Chivas, Marco Fabián, por sus constantes fiestas en una casa que dicen es de su propiedad.

De acuerdo con los colonos, el mediocampista del Rebaño organiza fiestas en el domicilio Callejón del Muro 4306 interior 9, las cuales suelen iniciar alrededor de las 18:00 horas y en ocasiones terminan a las 7:00 horas de la mañana siguiente.

Por eso interpusieron ante la Procuraduría Social y Ciudadana del Ayuntamiento de Zapopan una queja que quedó asentada en el expediente PSC/0500/32/346/2012/A, de la cual CANCHA posee una copia.

"Estábamos totalmente seguros que era un narco al principio, yo me enteré que era Marco Fabián porque ya lo habían conseguido (el nombre), yo juraba que era un narco, su comportamiento es de un narco, no es de un futbolista", explicó uno de los quejosos.

En un inicio acudían con el jugador a pedir que le bajara a la música, pero no fueron escuchados. Incluso, señalan que el jugador se burlaba a la distancia con señas.

Posteriormente los vecinos llamaron a la Policía de Zapopan cuando las fiestas se volvieron más frecuentes en septiembre; los uniformados acudían, pero no podían ingresar a la propiedad que se encuentra dentro de un coto privado.

Además era complicado entablar el diálogo debido a que el jugador no vive ahí, y sólo la usaba para sus fiestas.

"Era un burdel", dijo uno de los vecinos, "las fiestas eran en grande".

Según los testigos, en dichas reuniones vieron a mujeres desnudas, quienes se asomaban mucho al balcón que da al barranco.

Los vecinos más afectados son quienes tienen sus casas colindantes con la parte posterior de la propiedad, ya que debido a que los separa un barranco de unos 30 metros aseguran que esto provocaba eco de los gritos y la música.

"(Las fiestas) podían empezar a las 6 y a más tardar 7 de la tarde ya empezaban a llegar todos", contó uno de los vecinos afectados, " 9 o 10 ya estaban prendidos, 12 o 1 de la mañana eran aullidos, 3 y 4 de la mañana seguían en grande, 6 de la mañana amanecían, había menos gente, pero había".

Por eso los colonos se organizaron y trataron el tema en sus juntas...

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