Termina en muerte sueño de una ilegal

AutorDaniel Flores

Con el sueldo de una empleada doméstica en Guatemala y la responsabilidad de mantener a sus 3 hijos desde que se divorció, Julia Ramos Siguán, de 36 años, no tuvo otra opción que llenar su maleta de sueños e ilusiones y salió sola rumbo a Estados Unidos.

Durante 20 días, pasó hambre, frío y múltiples peligros al saltar de tren en tren, su medio de transporte para evadir a las autoridades mexicanas, pero ayer, uno de esos convoys se llevó su vida en San Nicolás.

La mujer brincó del tren en movimiento porque se había subido al que iba a Matamoros, no al que se dirigía a Nuevo Laredo, pero al caer se golpeó la cabeza y las ruedas de los vagones le amputaron el brazo derecho en Diego Díaz de Berlanga y Juan Pablo Segundo, antes Anillo Vial Metropolitano, a las 9:40 horas.

"Era divorciada y no le alcanzaba el dinero. Tenía estudiando a sus hijos: uno de 13 años en la secundaria, una de 10 en primaria y otra menor en la primaria", platicó su compañero guatemalteco Héctor Jovani García Ramírez, de 27 años, quien presenció el accidente.

"Me decía que se había venido para ayudar a sus hijos; ellos se quedaron con su abuelo, el papá de ella".

A mediados de julio, Ramos había salido de su casa, en la aldea...

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