Termina 'ilusión' en pesadilla en EU
REFORMA / Staff
Desde el Anillo de Circunvalación del Distrito Federal hasta Atlanta; de Tijuana a Florida, y de Houston a Nueva York, un clan de tlaxcaltecas controlaba una red internacional de trata de mujeres, a las que explotaba en condiciones que rayaban en la esclavitud, señala una investigación de los EU.
Primero las enamoraban, luego les prometían matrimonio, formar una familia y emigrar a la Unión Americana para comenzar una nueva vida, pero las jovencitas que mordieron el anzuelo terminaban sometidas a rutinas donde debían tener sexo con un mínimo de 20 hombres al día y no disponer de un solo peso de sus ganancias.
Por cada relación sexual de 15 minutos, cobraban un mínimo de 30 dólares y la meta era producir al menos 600 dólares diarios.
El FBI y la Oficina de Inmigración y Aduanas de Estados Unidos (ICE) detectaron en el 2009 que los Romero Rugerio prostituían a decenas de mexicanas y centroamericanas en Alabama, Carolina del Sur, Florida, Georgia Texas y Nueva York, a quienes cruzaron ilegalmente por las fronteras de Baja California, Sonora y Tamaulipas.
El primer aviso que hizo Estados Unidos a México sobre esta organización, consta en el oficio MISC: 0880: MX15BL08MX0001:lcn, entregado a la PGR por Louie García, Agregado de ICE en la Embajada de los Estados Unidos en nuestro país, con lo que inició la indagatoria PGR/SIEDO/UEITMIO/AP/034/2009.
En Puebla, Tlaxcala y el DF, las mujeres eran enganchadas por medio de relaciones de "noviazgo"; en la frontera de Sonora, el método con algunas salvadoreñas y guatemaltecas era engañarlas con ofertas de trabajo en la Unión Americana y pagarles el "coyote" para comprometerlas.
Del otro lado de la frontera, las mujeres eran bautizadas con un nombre artístico, vivían vigiladas por proxenetas que a veces no les daban de comer, que les daban de vestir sólo las prendas autorizadas por sus meretrices y que se apropiaban de todo el dinero de sus ganancias.
"La primera semana hice 2 mil 800 dólares y la segunda 2 mil y todo el dinero me lo quitó Miguel Ángel (Romero Rugerio)", declaró Nadia Martínez Montiel, el 25 de junio pasado en Estados Unidos.
Cristina Hernández Suárez alias "Alondra", a quien los Romero Rugerio delegaban el manejo de las chicas, desde un principio dejaba en claro a las mujeres recién prostituidas, cuál era su verdadera condición laboral.
La familia Romero Rugerio encubría su negocio de explotación sexual con el de las carnicerías. Ana Rosa Romero Rugerio declaró el 12 de...
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