Teatro: Manual del usuario (I)
| Autor | Abraham Vázquez |
Degustar una obra de teatro puede convertirse en todo un arte, divertido y nutritivo, como el probar un bocado con el refinado paladar de un gourmet.
Y es que el platillo escénico, que se sirve al abrirse el telón, es una compleja mezcla de ingredientes artísticos: música, danza, pintura y literatura; sazonados con condimentos técnicos y verosimilitud.
"¡El teatro es el arte de la vida!", expresará quien deguste una función guisada en su punto.
Así de grande puede ser la magia de una pequeña palabra. Esa palabra llamada teatro ha logrado hechizar a la humanidad y mantenerla al filo de las butacas, desde hace 2 mil 500 años, cuando surgió en la antigua Grecia.
¿Quieres conocer algunos secretos del teatro? No te despegues de tu butaca... ¡Ésta es... tercera llamada, tercera!...
Palabras y acción
Autor o dramaturgo
La palabra es la materia prima del teatro.
El creador toma un pedazo de vida y lo escribe para llevarlo a escena.
"El trabajo del dramaturgo es crear un mundo, con personajes e historia. También a él le toca definir el género y la atmósfera de la historia", explica Hernán Galindo, dramaturgo y director.
La dramaturgia es importante porque lleva el sello individual e irrepetible de cada creador.
Director de escena
Su labor es materializar el texto escrito por el dramaturgo en escena, sin embargo, siempre agrega su sello personal al montaje.
Tanto en los detalles de la obra, como en el trabajo de los actores sobre el escenario, se debe notar la labor del director.
"El director siempre agrega su propuesta personal, su interpretación. El director decide a qué asunto de la obra dará más peso", indica Galindo.
Él lleva la batuta en el análisis del texto dramático, primer paso fundamental, junto con su propia idea del montaje, para amalgamar todos los aspectos de la puesta, desde la actuación hasta el maquillaje.
Actor
Su reto es reconstruir con sus propios rasgos al personaje creado por el autor.
La presencia, el peso escénico, la gestualidad y el manejo de la voz son elementos que ayudan a valorar el trabajo histriónico.
"Lo más importante del actor es la frescura con que reciba la propuesta de la obra, su compromiso con el personaje y su capacidad para estar en contacto con el público", señala Leticia Parra, actriz y fundadora de La Percha Teatro.
Luces e irrealidad
Iluminación
En la actualidad es considerada todo un arte. La iluminación, juegos de luces que se proyectan sobre el...
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