Tasmania: La Isla del Demonio

AutorErnesto Ríos

La Isla de Tasmania es una joya verde de costas modeladas por fuertes vientos, de tierra agreste cubierta de extensos valles altiplanos y bosques alpinos. Una isla remota cuyo esplendor y peculiar riqueza natural única en el orbe pareciera la ideal para una escenografía cinematográfica.

Su biodiversidad abarca árboles milenarios coronados como los más altos del planeta, paisajes cubiertos por prados multicolores o selvas tropicales templadas; accidentadas costas, caudalosos ríos y míticos y añejos glaciares.

Un tesoro natural que ha originado que un 20 por ciento de toda la isla sea declarada Patrimonio de la Humanidad.

Cuenta con más de 12 parques nacionales y 400 reservas naturales y viñedos, además de acantilados decorados con pinturas rupestres, sitios históricos y pintorescos poblados.

Es una región ideal para quienes desean conocer flora y fauna única en el mundo y para los que gozan del ecoturismo, las caminatas, el campismo, la pesca con mosca y los espacios abiertos.

Tasmania es un estado de Australia que incluye a su vez a otras pequeñas islas que la rodean.

Se encuentra a aproximadamente 240 kilómetros al sureste del continente australiano y está separada de éste por lo que se conoce como el "Estrecho de Bass".

Una historia de separación

Se cree que la isla estuvo unida a Australia hasta el final de la última glaciación, hace unos 10 mil años, cuando una subida en el nivel del mar la separó del resto del territorio. Para entonces, el área ya estaba habitada por los denominados "aborígenes tasmanos", que llegaron a la zona hace al menos 35 mil años.

En el momento de la colonización británica, en el año de 1803, había entre 5 mil y 10 mil aborígenes, pero su número se vio pronto reducido por una extrema política sistemática de marginalización y exterminio y por las enfermedades, hasta el punto de desaparecer.

Tasmania debe su nombre al explorador holandés Abel Tasman, quien desembarcó en 1642. Dos siglos más tarde la población había crecido considerablemente. A principios del siglo 19 llegaron numerosos soldados y prisioneros de la Corona Británica. El primer asentamiento fue en la aldea costera de Hobart.

La intención de las colonias europeas era la de enviar a los...

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